Perfil
MODO FONTEVECCHIA
LA CONDENA A CRISTINA KIRCHNER

Paula Oliveto contó cómo gestaron junto a Carrió la denuncia a Cristina Kirchner por Vialidad

La diputada de la Coalición Cívica brindó detalles sobre la preparación de la causa Vialidad y recordó que Elisa Carrió le advirtió que la denuncia pasaría a la historia.

Paula Oliveto
Paula Oliveto | Télam

La diputada de la Coalición Cívica Paula Oliveto contó cómo preparó la denuncia contra Cristina Kircnher en la causa Vialidad, junto a Elisa Carrió, y contó que trabajaban siempre de noche para evitar filtraciones. “El kirchnerismo tenía mucho poder, y nosotros evitamos que se filtrara la denuncia y que se pudiera entorpecer incluso a los testigos que habíamos ofrecido”, dijo en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3).

Paula Oliveto es diputada nacional por la Coalición Cívica en su segundo mandato, ya que fue electa en 2017 por el frente Cambiemos y reelecta en 2021 por el frente Juntos por el Cambio. Integra las comisiones de Juicio Político, Presupuesto, Hacienda y Asuntos Constitucionales, entre otras. Antes fue auditora general de la Ciudad de Buenos Aires y legisladora porteña.

En su cuenta de X, usted dijo que Lilita Carrió le pidió redactar la denuncia de la causa Vialidad en conjunto. Cuéntenos cómo fue esa experiencia que terminó con este proceso de investigación que llevó 16 años y la condena de la expresidenta y exvicepresidenta.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Nosotros empezamos a hacer informes en relación al manejo de la obra pública en el 2004 y en el 2005, donde yo coordinaba un grupo de abogados, de contadores, de ingenieros, porque había que hacer la denuncia con fundamentos sólidos. Recién la hicimos en el 2008 y la firmaron los diputados nacionales de la Coalición Cívica en ese momento.

Y lo trabajábamos a la noche con Lilita porque recordemos que el kirchnerismo tenía mucho poder, y nosotros evitamos que se filtrara la denuncia y que se pudiera entorpecer incluso a los testigos que habíamos ofrecido, o la documental que estábamos llevando. Así que fueron días muy complicados.

Yo escribía medio difícil, como escribíamos los abogados en ese momento. Yo recién subía como auditora, pero había trabajado muchos años en el Departamento de Legales, entonces escribía así, como escribimos los abogados, difícil. Y ella me dijo en ese entonces: "Escribí fácil, porque esta denuncia va a quedar en la historia", y hoy, a la distancia, tuvo razón.

Paula, yo hablé con Lilita y ella me dijo exactamente esto: "No hay que provocar". Me pareció muy sensato dejar que los partidarios de Cristina hagan su catarsis y no provocar. Le hago este comentario porque, más allá de los inconvenientes que pueden tener los vecinos —porque alguien les pone choripanes, hacen las necesidades en la calle, ¿no le parece que el costo es bastante menor, teniendo en cuenta lo que uno hubiera imaginado hace unos años?

No, yo creo que es un incordio. Yo reaccioné después de que una embarazada decía que estaba sufriendo un ataque, porque estaba embarazada y no sabía cómo iba a salir de su casa, y que le habían usurpado la propiedad. Y ¿sabé qué? Yo creo que se pueden hablar las condiciones, que no son incompatibles. Que los partidarios de Cristina expresen su frustración o su acompañamiento, y que se respeten mínimas normas de convivencia. Una cosa no es excluyente de la otra.

Como hay negociaciones —porque las hay— sobre las condiciones y cómo llevar este proceso adelante, en esas negociaciones con las personas que envía Cristina tiene que también considerarse horarios, formas de convivencia, que de alguna manera amalgamen el derecho de las personas a expresarse en contra de la condena de Cristina, y el derecho de los que viven ahí de no ver perjudicada su vida.

Yo lo veo como bastante pequeño, para serle sincero. Me imagino, hace unos años, hubiera sido impredecible. Cristina condenada a prisión me hubiera generado sospechas de hechos más graves de los que están sucediendo. Es más, no sé cuánto dure. Supongo que una vez que el miércoles tengamos el punto, el clímax, después me parece que va a haber un proceso en el que, a lo mejor, dentro de diez días esto está totalmente regularizado. Como fue en el caso de los copitos. ¿Usted recuerda que inicialmente, los primeros días, era esa zona intransitable, y pasado el tiempo se fue desinflando? ¿Usted se imagina algo parecido?

Yo espero que sí. Pero, aun así, mientras se da ese proceso, viene un fin de semana. El que conoce el barrio de Constitución sabe que viven muchas personas mayores. Hay que tratar de hablar con los organizadores para, por ejemplo, que entre una ambulancia. Recién hoy pudo entrar la ambulancia del Hospital Italiano para llevar a su tratamiento a un vecino que vive ahí, que necesita hacer un tratamiento cada tres días.

El departamento de Cristina Kirchner es apto para su arresto domiciliario pero la decisión final será del Tribunal

Entonces, no te da derecho todo. O sea, si ponemos a las personas por encima de las reglas, entramos en una excepcionalidad constantemente. Y la convivencia, cuando empezamos con las excepciones, se tiende a dañar y a tensionar. Yo creo que esto lo tenemos que transitar de la mejor manera: dialogando, buscando alternativas, no dejando que se haga cualquier cosa, no retirándose el Estado, sino al contrario, personas de los gobiernos mediando para que se den los dos derechos.

El derecho a peticionar ante las autoridades y el derecho a manifestarse, pero también el derecho a dormir, a poder hacer tus compras, a que no te defequen en la vereda, a que puedas llamar a una ambulancia y pueda pasar, el derecho al tránsito. O sea, hay que armonizar. Y se armoniza hablando, no imponiendo.

Comparto plenamente. Sí, el tema es tratar de coordinar, que se pueda hacer de una manera que se respeten los derechos de todos. De cualquier forma, me parece que fue sabio el gobierno en no confrontar y dejar que se exprese, que se haga la catarsis. Por eso le decía que Lilita me decía: "No hay que provocar", y me lo transmitía incluso en el sentido periodístico, de que tenemos algunos colegas que sí lo hacen.

Sí, no, yo coincido en que no hay que provocar. Ya es bastante trágica la situación como para que uno le tire leña al fuego. Pero hay que ser respetuosos del otro.

Me decía también Lilita que le daba lástima Cristina. Ella la conoció más que usted... ¿pero le pasa lo mismo?

No, pero yo tampoco tuve el vínculo personal que tuvo ella, que lo es un vínculo que no le impidió, por supuesto, denunciarla e investigarla tantos años y hacer lo correcto. A mí lástima no me da. Primero, me da tristeza toda la situación, porque es horrible cómo Argentina está mostrando que una de sus máximas dirigentes está presa por robar.

O sea, pero lástima, lástima me dan los pobres, los que no tienen para comer, los que la están pasando muy mal. Me dan lástima otras situaciones. Pero obviamente, en lo que dijo Lilita, le incide el conocimiento a la persona.

Claudio Mardones (CM): Se especula mucho sobre las condiciones de detención. Desde del tribunal, del TOF 2, y también de parte de los jueces y fiscales, surge en este momento que, ante el nivel de movilización, endurecerían las condiciones del arresto domiciliario, o no le aceptarían el lugar, o cerrarían su acceso a las redes, o buscarían obligarla para que no esté en el balcón.

Desde su experiencia, y como diputada de la Nación, ¿qué interpretación hace de esto? ¿Hay un tema que está vinculado realmente con el tema del espacio, o ve que hay otro capítulo todavía que no se ha cerrado y que está concentrado en lo que puede pasar el miércoles? ¿Esa disputa entre si hacer una escena como pasó con Amado Boudou, u otra circunstancia?

Yo no creo que el tribunal, que le dio cinco días para presentarse, quiera hacer una escena. Escena es llevarla detenida en ese momento. No, me parece que no está. Creo, sí, que Cristina está cometiendo el mismo error que durante las causas, donde hizo una defensa política, pero no hubo una defensa técnica.

En ningún momento trató de rebatir temas como sus sociedades con Lázaro Báez y demás. Siempre lo manejó desde la política. Y creo que esto es lo mismo. Porque si vos estás a punto de solicitar una domiciliaria, donde una de las causales es algo que es muy cierto, que atentaron contra su vida, vos no podés estar bailando cada cinco minutos en el balcón, a tiro de cualquier francotirador loco que pueda existir.

El juez Gorini postergó su licencia y estará presente para coordinar la detención de Cristina Kirchner

Entonces, esa sensación de peligro que ella refiere como una de las condicionalidades de su prisión domiciliaria, en los hechos y en su actitud parece incongruente. Entonces, me parece que ahí hay un tema. Después, ella es igual ante la ley como cualquier otro, y tiene derecho a expresarse, y tiene derecho a recibir a sus familiares, y tiene una condición de salud que la conocemos, y tiene más de 70 años.

Así que la prisión domiciliaria, a mi entender, procede. Ahora: es una prisión. Y tiene que tener las mismas condiciones de prisión domiciliaria de otras personas que también la han obtenido a lo largo del proceso.

Alejandro Gomel (AG): ¿Esto significa que el tribunal no tendría que recortarle la posibilidad de notas telefónicas, hacer uso del streaming, tener reuniones en su casa, recibir gente? ¿Todo esto se puede hacer o no, en domiciliaria?

Los presos reciben periodistas. Los presos dan notas. Lo que vos no podés es, por ejemplo en el caso de ella, que tiene otras causas abiertas, entorpecer las investigaciones en lo que tiene que ser Cuadernos o la Ruta del Dinero K, porque ella tiene otras causas abiertas. Entonces también tiene que manejarse con prudencia en relación a esas causas.

AG: Y qué lectura política hacen de esto. ¿Beneficia al peronismo? ¿Beneficia, en realidad, al Gobierno, porque no está Cristina, que tiene un piso del 30%, polariza todavía más y acota la posibilidad de una tercera vía?

Mirá, es medio chiquito pensar a quién beneficia cuando vos tenés una persona privada de la libertad por seis años. ¿Qué querés que te diga? A mí me parece que no beneficia a nadie. No beneficia a un país haber tenido a una presidenta en estas circunstancias, condenada. No sé a quién beneficia.

AG: Bueno, hay una realidad: no va a ser candidata. Y esto modifica el escenario, digamos.

Si, pero el peronismo también tiene históricamente una base del 30% unidos. La realidad es que ahí, en el Partido Justicialista, estaban muchos que plantearon una renovación al kirchnerismo y ahora se alinearon. Y el Gobierno tendrá que enfrentar, en la provincia de Buenos Aires, la alternativa de un peronismo unido que es absolutamente, desafiante, porque tienen un caudal de votos muy importante, intendentes, inserción territorial…

Yo creo que el peronismo excede a una persona, como la democracia excede a pensar que representa sola una persona. Me parece que estamos sobreevaluando un montón de situaciones, la verdad Pero bueno, no son tiempos de prudencia, son tiempos donde el que grita más fuerte e insulta más, tiene más preponderancia.

Comparto esto de que, a la larga, nadie gana. Puede haber ventajas coyunturales, pero a la larga perdemos todos. Tanto con la polarización, con cualquier extremismo. Valoro su tono, siempre siempre cuidado, Paula. Le agradecemos mucho y le mando un fuerte abrazo.

Gracias a ustedes. Hasta luego.

MC cp