Puma confirmó que no continuará siendo sponsor de los atletas rusos
En el marco de la invasión a Ucrania, la firma de indumentaria y calzado emprende una cancelación masiva como forma de castigar al gobierno de Vladimir Putin.
Elena Isinbáieva Kai Pfaffenbach |
Reuters
Juan Parrondo
La marca de indumentaria alemana Puma anunció que romperá su vínculo como patrocinador con los atletas e instituciones deportivas rusas. La invasión rusa afectó a distintos sectores y el deportivo no es la excepción.
A los casos de Roman Abramovich destituido del Chelsea, la prohibición de equipos rusos en participar en torneos de UEFA y FIFA, a Nikita Mazeppin desafectado de HASS en Fórmula 1 y la prohibición de los atletas rusos y bielorrusos de participar en Wimbledon, dentro de muchos otros casos, se le suma la desvinculación de la fábrica de indumentaria deportiva para con los atletas del país presidido por Vladimir Putin.
La invasión de Rusia a Ucrania continúa y las consecuencias que genera afectó a distintos sectores, entre ellos, el mundo deportivo. En un principio, las sanciones para los atletas se anexaban directamente si el deportista o personalidad en cuestión tenía algún vínculo con Putin como para dictarle alguna sanción, como el caso del ex dueño del Chelsea, Abramovich, quién se sabía que tenía contacto estrecho y una relación con el mandatario ruso.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Luego la situación fue empeorando y la guerra continua, por eso distintas marcas y eventos deportivos quieren alejar su imagen de la guerra desafectando atletas y rompiendo contratos. Puma no fue la excepción a esta última medida y decidió no ser el patrocinador de atletas e instituciones rusas.
A pesar de ello, el fabricante de ropa deportiva sostuvo que los tres primeros meses fueron positivos para ellos, ya que la fuerte demanda de minoristas y consumidores ayudó a superar los conflictos que se generaron entre Rusia y Ucrania, las mismas que también generaron interrupciones en la llegada de suministros.
