En diálogo con Modo Fontevecchia, Vita Carnevale, vicepresidenta y voluntaria de la ONG Vida Solidaria, brinda ayuda a personas que, por diferentes motivos, se encuentran sin un hogar. Contó lo difícil de afrontar una ola polar sin un techo y remarcó qué, después de la pandemia, “hay más gente viviendo en la calle”. Escuchá el programa por Radio Perfil FM 101.9 o miralo por Net TV.
Marisol Juárez (MJ): ¿Cuál es la tarea de Vida Solidaria?
Estamos desde hace ocho años con la gente que vive en la calle, estamos en la Ciudad de Buenos Aires pero también tenemos filiales en el exterior, como en Barcelona y en París, que hoy están frenadas por la pandemia y no pudimos retomarlas. Somos una organización de vecinos. No hacemos política ni trabajamos con política, lo mismo con el tema de la religión. Somos vecinos que nos sensibilizamos y nos unimos para ayudar. Ese es nuestro lema y a lo que apunta Vida Solidaria.
Una de nuestras actividades principales es, no sólo la asistencia a la gente de la calle, sino que, el objetivo de esa asistencia, es sacarlos de la calle, acompañarlos durante los primeros seis meses hasta que puedan lograr su independencia económica. Esto implica ayudarlos a conseguir un hotel, a conseguir un trabajo, de forma que puedan continuar su vida fuera de la calle.
MJ: ¿Han podido lograr sacar a alguien de la calle?
Empezamos hace ocho años a conocer las calles. Es importante conocer por qué la gente está allí y, hace un año, empezamos a poner en funcionamiento este plan. Llevamos a 27 personas que salieron de la calle, entre ellos muchos niños también, familias, hombres solos, mujeres solas y hoy estamos en hoteles donde se los traslada en primera instancia. Ahora trabajamos con una familia que son siete chicos con la mamá y otro muchacho que creo que en un mes podrá lograr su independencia económica y seguir su camino porque ya está bien ubicado, con un buen trabajo. Apuntamo, ahora que vino el frío de golpe, es relevar nuevos casos y poder sacar a más personas más rápido, para que no pasen frío o mueran de frío en la calle.
MJ: Están realizando bolsas de dormir con sachets de leche y yogur, ¿verdad?
Si, a eso se dedica el área de ecología. Hacemos reciclado y solidaridad. Con 70 sachets de leche o yogur bien lavados y abiertos, se cosen en máquinas de coser hogareñas y se confecciona una bolsa de dormir. El material de los sachets es térmico, entonces no pasa el agua, la humedad, el frío, es liviano, fácil de transportar, con lo cual la gente, que debe dejar el lugar donde duerme, puede doblarlo y queda muy pequeño.
Más allá de esta discusiones, la pobreza con el frío es mucho más lacerante. No sé cuánto el cambio climático puede modificar esto. Quedé perplejo por su tarea, son héroes. ¿Notan más gente en la calle este año, que el año anterior?
Si, hay más gente, hay nuevas personas en la calle producto de la pandemia. Seguimos saliendo a la calle y paramos solamente los primeros dos meses. Encontramos nueva gente en situación de calle. Esto fue producto de perder sus trabajos, familias que vivían de las changas, que se habían cortado solas y no pudieron seguir pagando sus alquileres o sus hoteles. Hasta seis meses los bancaron pero después tuvieron que parar a la calle. Esa gente, todavía hoy, sigue allí, no se han podido reinsertar.
Tenemos el caso de un señor de 52 años, que hace un año y medio está en la calle a raíz de haber perdido su trabajo, no tiene familia ni contacto con ella. Hoy pasa frío y tiene problemas de salud porque le falta un riñón. A esa persona, creo que en dos o tres días, lo llevaremos a un hotel. Lo que pasa es que es toda una cadena, se busca y se consigue el hotel, a través de donaciones, se consigue el dinero para pagar el primer mes y la organización ayuda con la ropa, la comida. Como este caso hay miles. Algunos están solos, pero otros con toda su familia. Gente en la calle hubo siempre, pero ahora hay más por la pandemia. Es gente nueva, que no tiene los hábitos de la calle.
A mi me tocó vivir en el extranjero, en Nueva York, en los últimos años de la dictadura. Sin embargo, en ese momento. con Reagan impresionaron los homeless y la riqueza que había. Recuerdo su cinismo, ellos decían que "la nieve limpiaba Nueva York". ¿Por qué te dedicás a esto?
Tengo 45 años y soy de Pergamino y hace más de 20 que estoy en Buenos Aires: siempre tuve vocación de servicio. Esto es puramente voluntariado y aparte tengo mi trabajo para mantenerme. Trato de llegar a la gente para que se sumen, hay lugar para todos en el voluntariado. Hay voluntarios virtuales que solamente manejan las redes, otros cosen y arman las bolsas de dormir en sus casas. Hay mucho para hacer. Buscamos contagiar la solidaridad. Cuando veamos una persona en la calle, no demos vuelta la cara, por eso ellos dicen "somos los invisibles", porque ven esa situación.
CB PAR