El gobierno de Corea del Sur emprendió una lucha contra una plaga de “chinches de cama” que generó preocupación en un país que prácticamente se había librado de este tipo de inconvenientes.
Desde la semana próxima, las autoridades iniciarán inspecciones en lugares considerados "vulnerables", como baños públicos y establecimientos de hospedaje, tomando medidas de desinfección inmediata en caso de encontrar chinches.
La campaña, que será de cuatro semanas, es una confirmación de que el brote, posiblemente originado en Francia en septiembre, se está consolidando en Corea del Sur. Hasta el martes, se habían registrado 30 casos en todo el país, según informó la agencia de noticias Yonhap, y se destacó que más de la mitad de estos casos se concentraban en la capital, Seúl.
La crisis surge a raíz de un brote que se originó en Francia, justo cuando el país se encontraba organizando la Copa Mundial de Rugby y preparándose para acoger los Juegos Olímpicos de 2024 en su capital. Los viajeros compartieron imágenes y videos que aparentemente mostraban la presencia de estos insectos en el metro de París, en los trenes de alta velocidad y en el aeropuerto Charles de Gaulle.
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Eso generó preocupación acerca de una posible propagación del brote al Reino Unido. Sin embargo, algunos expertos señalaron que estos insectos ya se encontraban presentes en la red de transporte público de Londres y en lugares como cines, hospitales y otros espacios públicos. La empresa especializada en control de plagas, Rentokil, informó que experimentaron un aumento del 65% en los casos de chinches en Gran Bretaña durante el segundo trimestre de este año en comparación con el año anterior.
La guerra en Corea del Sur contra las "chinches de cama "
Corea del Sur logró prácticamente erradicar las chinches en la década de 1960 durante una campaña nacional de desinfección. En los diez años anteriores a la invasión reciente, se habían registrado solamente nueve casos en el país.
El gobierno destinó 500 millones de wones, equivalentes a 312 millones de dólares, y estableció un equipo de respuesta especial encargado de abordar la infestación. Este equipo se reunirá semanalmente para evaluar el avance de la campaña.
Los funcionarios advirtieron que anticipan un aumento en el número de casos y alentaron al público a no sentir vergüenza al informar sobre cualquier avistamiento de chinches. "Existe la percepción de que la aparición de chinches depende de los individuos, por lo que algunas personas se abstienen de presentar un informe por temor a que pueda verse como un signo de mala higiene", dijo Yonhap citando a un funcionario.
Las autoridades relacionaron la propagación de chinches con la flexibilización de las restricciones de viaje tras la pandemia de COVID-19. La Agencia de Prevención y Control de Enfermedades de Corea brindó orientación a las personas que han llegado desde países donde se reportaron brotes, como Francia y Gran Bretaña, informó el Korea Herald.
Aunque los insectos no tienen la capacidad de transmitir enfermedades, su picadura genera una intensa comezón que podría desencadenar infecciones secundarias en la piel.
Qué son las “chinches de cama”
Las "chinches de cama" son insectos pequeños sin alas que suelen alimentarse de sangre humana durante la noche. Se esconden en las costuras de los colchones, en sus bases o en hendiduras y grietas cercanas a la cama.
Para combatirlos se debe retirar o fumigar todo material infestado y asegurarse que las chinches hayan desaparecido.
Cómo identificar una chinche de cama
Los adultos son pequeños (cerca de 1/5 pulgada), ovalados y de color rojo tirando a café. Las ninfas o chinches inmaduras son más pequeñas y de color más claro. Las chinches de cama sólo se alimentan de sangre.
Los adultos se pueden alimentar cada pocos días, pero pueden sobrevivir muchos meses si no lo hacen.
BR/LT
