Hasta el 9 de septiembre de 2020: "El coronavirus es un enemigo muy difícil, que no sabemos cuándo lo derrotaremos". "Estamos cuidando la vida, la economía se deteriora, pero se recupera, pero los miles de muertos no los recuperamos". "Con gran unidad social y política, la inmensa mayoría de la sociedad tiene conciencia de los riesgos que implica el Covid-19. Sigamos cuidándonos y trabajando unidos para salvar vidas" . "Mi amigo Horacio Rodríguez Larreta" . Palabras del Presidente Alberto Fernández.
A partir del 9 de septiembre de 2020: “Esa maravillosa ciudad que es Buenos Aires, es al mismo tiempo una ciudad que nos llena de culpa, de verla tan opulenta, tan desigual y tan injusta con el resto del país”. “Es necesario repensar la coparticipación”. "Siempre soñé con el momento en que Buenos Aires le devuelva al resto del país todo lo que este le dio". Palabras del Presidente Alberto Fernández.
Alberto Fernández: "En algún momento tenemos que rediscutir la coparticipación"
El miércoles 9 de septiembre de 2020, el presidente de los argentinos decidió repentina y discrecionalmente recalcular su frente de batalla. Así, pasamos de lidiar contra un enemigo silencioso, que nos necesitaba más unidos que nunca para poder hacer frente a la crisis sanitaria más tremenda de las últimas décadas, a colocar en la agenda de temas prioritarios a la coparticipación federal, y así despojar, a través de un decreto de necesidad y urgencia (DNU), sin titubeos, de enormes recursos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), que contará con unos 35.000 millones de pesos menos por año, en concepto de coparticipación, para cedérselos a la Provincia de Buenos Aires (PBA).
Dos fenómenos absolutamente tóxicos para la república se pudieron observar en apenas horas, demostrando una vez más, que, en Argentina, sin o con coronavirus, vale mancillar las instituciones y dividir a los argentinos sin pudor alguno. Un primer fenómeno refiere a la toma de decisión por parte del presidente de una medida que implica quebrantar la Carta Magna, a partir de un DNU que va en contra de lo enunciado por una ley establecida (escrita) en la Constitución Nacional, la Ley de Coparticipación Federal. Un segundo fenómeno refiere a volver a priorizar intereses político-partidarios por sobre los intereses de la ciudadanía argentina integrada. No se contempló, por ejemplo, ceder también recursos de Santa Cruz, que cuenta con mayores ventajas que la ciudad porteña en concepto de coparticipación. Y el presidente, mientras tomaba la decisión de quitar recursos a Rodríguez Larreta, twitteaba agradeciendo a los gobernadores “propios” por apoyar la construcción de un nuevo federalismo que empiece a corregir los desequilibrios de nuestra patria. Así, la Argentina partida volvió a sus andadas.
Bordet sobre coparticipación: "Hay que ver la Argentina como un todo, como hace hace el Presidente"
Mientras tanto el coronavirus escala con prisa y sin pausa en Argentina, ocupando primeros lugares de contagios diarios a nivel mundial e incluso ocupando primeros lugares en fallecimientos correspondientes a la semana en curso.
Así, nos confinamos seis meses en nuestras casas, desatendimos enfermedades de toda índole, porque en Argentina desde el 20 de marzo solo vale enfermarse de coronavirus, venimos padeciendo trastornos psicológicos varios, producto de un encierro, temor e incertidumbre garrafales, las economías domésticas vienen padeciendo tremendas dificultades, la pobreza sigue aumentando y los más eximios economistas vaticinan que llegará a alcanzar a un 60% de la población, nuestro sistema de salud está colapsando en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y en varias provincias del país frente al coronavirus que prolifera persistentemente, a pesar de cuarentenas interminables, se pisotearon una vez más las Instituciones violando la Constitución Nacional y se estimuló que la grieta cale más hondo que nunca entre los argentinos, mientras parece estallar una suerte de campaña descarnada a tres años y medio de que vuelvan a celebrarse las elecciones presidenciales.
Y en algún momento osamos compararnos con Suecia.
Sandra Choroszczucha * Politóloga y Profesora (UBA). www.sandrach.com.ar