El 5 de abril de 2020, durante el estricto Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio por la pandemia de Covid-19, Florencia Magalí Morales salió a comprar comida y terminó detenida presuntamente por haber violado la cuarentena. Después, la mujer, madre de dos hijos, fue hallada muerta dentro de la celda de la comisaría y la Policía reportó que se había suicidado, pero ahora la Justicia aprobó el cambio de carátula.
Todo ocurrió en la localidad de Santa Rosa de Conlara, San Luis, a 50 kilómetros de la ciudad de Merlo, donde Florencia vivía con sus hijos de 11 y 7 años y su nieta de 2. Había nacido en Mendoza, era madre soltera y trabajaba en un hotel; y ese día salió en bicicleta para hacer las compras.
San Luis: una pericia dice que fue estrangulada la mujer que murió en una comisaría
La Policía la detuvo porque supuestamente la terminación de su documento de identidad no le permitía circular en ese momento. Esa tarde la encontraron ahorcada con el cordón de una prenda, luego de haber pasado horas pidiendo auxilio. La insistencia de su familia y, con el tiempo, las pruebas plantaron la duda sobre si realmente ella se había quitado la vida y una pericia contradijo la autopsia inicial señalando que sufrió "asfixia por estrangulamiento".
Ahora, el Dr. Federido Putelli, uno de los representantes de la familia, informó que la Cámara de Apelaciones de Villa Mercedes aprobó el cambio de carátula por "Torturas agravadas por el resultado muerte”, pero no hicieron lugar al pedido de la querella para mutar la calificación a "femicidio".
El letrado también dijo al medio El Corredor que se pidió investigar al médico forense Gustavo Lafourcade, encargado de la primera autopsia. En ese estudio se determinó que Magalí tenía "contusiones en los brazos" y "escoriaciones debajo de las rodillas", compatibles con autodefensa, pero esto no fue incorporado al acta de defunción.
La perito Vanina Elizondo expuso que el cuerpo tenía más de diez moretones, le faltaban dos músculos y una arteria del cuello y calificó el informe como “incompleto y tal vez hasta confuso”.
Los policías imputados como "coautores" son el excomisario Reinaldo Clavero, el exsubcomisario Marcos Ontiveros, la exsuboficial Eugenia Argüello y la exagente Victoria Torres. Todos fueron expulsados de la Policía de San Luis en noviembre de 2022 por incurrir en “faltas disciplinarias gravísimas”.
Luego de que se resuelvan los planteos y nulidades realizados por los defensores ante el Superior Tribunal de Justicia, el expediente volverá a manos del Juzgado Multifuero de Santa Rosa, a cargo del juez Jorge Pinto. Así, la familia de Morales podría volver a pedir la prisión preventiva de los imputados.
"Querían encubrir todo"
A tres años de esa "muerte dudosa", familiares y amigos de Magalí marcharon por Santa Rosa del Conlara junto a organizaciones feministas de San Luis y Mendoza hasta la puerta de la comisaría en la que murió la víctima.
En ese sentido, Celeste, hermana de la mujer fallecida, dio una entrevista en la que criticó el proceso judicial y volvió a apuntar contra los uniformados. “Evidentemente querían encubrir todo. Se comprobó que la mataron. No entiendo cómo Lafourcade sigue trabajando. Fue incompleta la autopsia, que la hizo peor que un pibe de primero de medicina”, afirmó al medio local El Chorrillero.
“Los nenes se enteraron un año y medio después, tratamos que no le llegara información, fue en tiempos de pandemia, favoreció para encontrarle una vuelta a cómo podríamos explicarles. Ellos lo llevan bien, pero pasaron tres años y hay muchas cosas que uno se cansa”, comentó la mujer.
“Todo nos duele, pero hay que pelearla. Aunque sea un mínimo puede cambiar un montón. Si no hubiera sido por la movida de todos, las autoconvocados, los medios, todos, quizás nada hubiera avanzado”, cerró.
fp / ds