Caso Naiara Durán: una mudanza exprés para tapar manchas de sangre y más detenidos
Fueron apresados el padre y la hermana de la mujer sospechosa, pareja del ex de Durán, por encubrimiento agravado. La víctima era madre de tres niños.
Nuevos detenidos por el femicidio de la joven en San Pedro |
Télam
El padre y la hermana de la mujer apresada por el femicidio de Naiara Durán, la joven asesinada a puñaladas y encontrada dentro de un tacho de aceite de 200 litros a orillas del río Paraná, el jueves pasado en San Pedro, quedaron detenidos por el caso y serán indagados este miércoles, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Mario y Camila Franco, padre y hermana de Daniela Candela Franco (35), quien ya estaba presa junto a su concubino Francisco Leonardo Vlaeminck (35), expareja de la víctima y padre de uno de sus tres hijos.
Mario Franco, de 73 años, será indagado como "partícipe secundario" del crimen o por "encubrimiento agravado", y a su hija Camila, de 24 años, se la indagará también por esa última calificación, por lo que no se descarta que la joven recupere la libertad tras la audiencia, ya que es un delito excarcelable.
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Naiara Durán fue hallada asesinada el jueves pasado en San Pedro
Según las fuentes, las aprehensiones se concretaron en la tarde de este martes en un domicilio de la calle Güemes al 180 de San Pedro, donde se secuestraron un Renault Sandero y un Renault 11, tres teléfonos celulares, una silla y una soga.
Las fuentes policiales indicaron a Télam que se cree que los nuevos detenidos se mudaron de ese lugar el lunes posterior al domingo en el que se cometió el crimen y que testigos observaron mucho movimiento con el Renault 11. Por ello, no descartan que en esas maniobras se hayan descartado del cadáver, por lo que tomaron muestras de tierra de los neumáticos de los vehículos para su posterior análisis.
Además, en el domicilio de Güemes al 180 la policía científica halló manchas de sangre que podrían ser de la víctima. Una de las hipótesis de la fiscal María del Valle Viviani, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°7 de San Nicolás, es que los sospechosos hicieron una “mudanza fugaz” un día después del femicidio.
Según la investigación de Viviani, el hecho se cometió dentro de la casa. Las pesquisas allanaron también un taller situado en la calle Juan Ismael Giménez al 1200, enfrente de donde apareció el cuerpo de la víctima y en el que se incautaron otros dos celulares.
Francisco Leonardo Vlaeminck y Daniela Candela Franco
La expareja y padre de uno de los hijos de Naiara Durán fue detenido junto a su concubina, acusados del homicidio de la joven, luego de un allanamiento en su vivienda, un monoambiente de la calle Primera Junta al 500.
“Se determinó que Naiara concurrió al domicilio de Francisco en el horario de las 16 horas del domingo 13 y no salió por ninguna de las arterias, ni por la misma calle que ingresó, ni por las arterias paralelas. Por lo tanto, se hizo un allanamiento en el domicilio de Vlaeminck”, indicó una fuente del caso.
En ese domicilio, la policía científica también notó que las paredes estaban recién pintadas, por lo que se procedió a tomar rastros del lugar y analizarlos a través del luminol, que dio positivo a manchas de sangre que se deberá comprobar si son pertenecientes a Naiara Durán.
Naiara Durán, de 25 años, era madre de tres niños
En el lugar también se incautaron tres teléfonos celulares, un punzón, un destornillador y pelos que serán analizados. "Estamos tratando de reconstruir el hecho. La relación entre ambos era conflictiva. Había variasdenuncias de Vlaeminck contra Durán y viceversa. La última data del 8 de agosto, en la que el hombre la denuncia y le fijan a ella un perímetro", explicó un vocero de la pesquisa.
Vlaeminck y Daniela Franco se negaron a declarar ante la fiscal de la causa, quien los indagó por "homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y femicidio" en el caso de él; y a ella por el mismo delito, pero solo con el primero de los agravantes.
Por el caso habían sido detenidos inicialmente Mario Damián Gil (31), última pareja de Durán y con quien tenía también un hijo, y Antonella Russo, prima de la víctima, pero los dos quedaron en libertad luego de declarar ante la fiscal.
El femicidio de Naiara Durán
El femicidio de Durán fue descubierto el jueves pasado, cuando efectivos de la Prefectura Naval Argentina encontraron el cadáver de la joven envuelto en una lona, dentro de un tacho de 200 litros y con signos de haber recibido siete puñaladas. Una vez fallecida, además, le quebraron la muñeca.
La víctima, madre de tres niños, se encontraba desaparecida desde el domingo 13 de agosto y su abuela había realizado, el miércoles siguiente, una denuncia de averiguación de paradero ante la policía de San Pedro. La denuncia fue radicada luego de varios días porque, según su abuela, la joven padecía consumo problemático de sustancias y "solía ausentarse por días sin avisar dónde pasaba la noche".
La joven recibió siete puñaladas y su cuerpo fue descartado dentro de un bidón, al riacho San Pedro
La policía, en colaboración del personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás, iniciaron la búsqueda de la joven y, con cámaras de seguridad, establecieron que Naiara había ingresado a una propiedad que tiene dos viviendas: una que da al frente, donde reside su exnovio Mario Damián Gil, y otra que está en el fondo, habitada por la prima de la víctima, de 26 años.
Por tal motivo, la fiscal Viviani solicitó el allanamiento en esos domicilios, donde se secuestraron dos teléfonos celulares, entre ellos el de Naiara, aunque no halló rastros de la joven. Su cuerpo, finalmente, fue hallado por un pescador en el riacho San Pedro, margen derecho del Paraná. Prefectura rescató el tambor de aceite que flotaba sobre el agua.
El viernes pasado, se realizó una movilización por el centro de San Pedro hasta los tribunales locales para pedir justicia por Durán, bajo la consigna "terminar con el machismo". Allí, Tamara, la madre de la víctima, reclamó: “Quiero justicia para mi hija, la mataron como un perro de siete puñaladas, la envolvieron con un mantel, la ataron con cables las manos y los pies, la pusieron en un bidón de 200 litros y la tiraron al río”.
