La segunda rueda de reconocimiento implementada ayer tras la inicial del jueves complicó aún más a uno de los diez detenidos, ya que fue nuevamente señalado como el autor de las patadas que recibió Fernando Báez estando en el piso, inconsciente. Se trata de Máximo Thomsen, a quien dos testigos responsabilizaron del hecho sin titubear.
A diferencia de lo ocurrido el jueves, las identificaciones no fueron presenciales sino a través de registros fotográficos, informaron fuentes judiciales, y explicaron los motivos: “Los chicos, con estos días que estuvieron encerrados perdieron el color tostado de la piel y las personas que se encontraron para conformar las ruedas están mayormente bronceadas, lo que era una complicación”.
Los voceros consultados por PERFIL detallaron que “tres testigos participaron del procedimiento y dos de ellos reconocieron a Thomsen como el que pateaba a Fernando en el piso. Uno identificó a Ciro Pertossi como quien le pegaba a un amigo de Fernando y quien evitaba que ajenos a la gresca permitieran que la misma terminara, otro testigo vio a Enzo Comelli dentro del local y otros dos reconocieron a Matías Benicelli como el que arengaba para golpear al damnificado. Uno más reconoció a un quinto implicado”.
En cuanto al formato, dijeron que “al testigo se lo interroga en primer lugar por las circunstancias que vio y la descripción de las personas que tengan que reconocer, y luego, en lugar de tener que ver por una mirilla, se le presentan cuatro fotografías y se determina si en esas fotos está la persona. Las imágenes usadas junto a las de los imputados son obtenidas de legajos policiales o de imputados de otras causas. Lo importante es que las características sean parecidas”.
Tras el trámite judicial –aún quedan dos días de ruedas, lunes y martes–, los implicados regresaron a la comisaría de Pinamar, y ya desde el martes ocuparán lugares en la Unidad Penitenciaria Nº 6 de Dolores, luego de que la fiscal de la causa solicitara cupos. Los jóvenes irán al sector de la alcaidía que tiene esa cárcel, por lo que no tendrían contacto con la población carcelaria. Finalmente, se descartó que sea de los internos de allí el video que se filtró ayer, donde los condenados “esperaban” a los deportistas.
Uno de los testigos claves de la rueda de ayer, y quien ya figura en el expediente, es un amigo de Fernando, quien contó cómo se sucedieron los hechos: “Estábamos hablando cuando aparece por detrás un grupo de sujetos”. Báez fue el primero en caer: “Lo empujaron y lo patearon en el piso, yo traté de defenderlo y me pegaron patadas, principalmente en la cabeza. Cuando me levanté vi a algunos amigos golpeados y a Fernando ensangrentado, con la cara golpeada e inconsciente. Una chica comenzó a hacerle RCP. Al menos vi a ochos pegándonos”. Para finalizar, el joven dijo que uno de los rugbiers, tras la paliza, amenazó: “A ver si nos volvés a pegar, negro de mierda”.
Los diez deportistas están imputados por el delito de “homicidio agravado por premeditación de dos o más personas”, cuya pena es la de reclusión perpetua. Además, Fernando Burlando y Fabián Améndola, abogados de la familia Báez Sosa, solicitarán que se incluya también la figura de “alevosía”.