Once personas fueron detenidas y se secuestraron unos cincuenta kilos de marihuana y cerca de 650 envoltorios de cocaína en allanamientos realizados en la Villa 1-11-14 del Bajo Flores porteño para desarticular una organización dedicada a la comercialización de drogas y que está vinculada al histórico narco peruano Marco Antonio Estrada Gonzáles, alias “Marcos”, expulsado del país meses atrás.
Fuentes judiciales informaron que el juez federal Ariel Lijo solicitó doce arrestos de narcos vinculados a la histórica banda liderada por “Marcos” y sus sucesores, aunque de ellos solo fueron localizados cinco, apodados “Coca”, “Vero”, “Walter”, “Waflera” y “Pontu”, mientras que siete permanecen prófugos.
En tanto, otros tres fueron hallados con drogas en su poder y quedaron presos, mientras que tres restantes quedaron a disposición de la Justicia de CABA.
De acuerdo a los voceros, efectivos de la División Operaciones del Área Metropolitana Oeste de la Policía Federal Argentina (PFA) efectivizaron en total 24 allanamientos, la mayoría en el interior del asentamiento del Bajo Flores y en domicilios identificados como pertenecientes a integrantes de la banda encabezada por los hermanos “Marcos” y Fernando “Pity” Estrada Gonzáles desde Perú.
Los pesquisas creen que, luego de haberse desarticulado los estamentos superiores de la organización, quienes quedaron adoptaron nuevas dinámicas delictivas para proseguir con el negocio narcocriminal bajo la supervisión de “Marcos”, extraditado a su país, y de “Pity”, prófugo en Perú.
Además de domicilios en el Bajo Flores, se allanaron viviendas de los barrios porteños de Villa Soldati, Villa Lugano y Pompeya, y una en Virrey del Pino, partido de La Matanza, añadieron las fuentes.
De los detenidos, diez son de nacionalidad peruana y cinco de ellos tenían orden de arresto en el marco de la investigación que desarrolla el Ministerio Público desde hace años en ese asentamiento del Bajo Flores.
En septiembre de 2021, tras la detención de dos sindicados líderes narcos que controlaban la zona –Johnny Arnao Quispe, alias “Pantro”, y Ulises Romero Godoy, alias “Pitudo”–, la actividad ilegal continuó en manos de otros miembros de la organización.
“Se pudo establecer que durante los años 2021 y 2022 la estructura de la organización se mantuvo vigente, conservando el dominio territorial ejercido sobre el sector histórico y que en ese sector la actividad principal sigue siendo la venta de drogas –aunque veremos también que se han incorporado otras actividades ilícitas como la extorsión–”, indicaron los fiscales al pedir los allanamientos y detenciones que se llevaron a cabo en las últimas horas.