Pablo Ventura fue liberado este martes alrededor de las 22 horas después que no se hallaran pruebas de que participara en el homicidio de Fernando Báez Sosa en la comisaría 1° de la localidad bonaerense de Villa Gesell. El joven, de 21 años, salió de su detención profundamente shockeado y su padre explicó que, instantes antes, se había “descompuesto” por la emoción.
Según explicó José María Ventura, padre de Pablo, su hijo era “culpado” por el grupo de rugbiers cuando cometían “picardías” y “bromas”. “Pablo no tenía nada que ver, es una locura. Es una injusticia lo que sucedió con esto. Un amigo de los chicos estos contó que cada vez que ellos hacían una pavada, acusaban a Pablo Ventura”.
“Yo sinceramente no creo que estos chicos supieran que se había muerto otro joven, por eso mintieron y acusaron a Pablo, como una broma, ni siquiera como una malicia, sino como una joda más, ni siquiera sabían que el chico estaba muerto”, agregó Ventura. “Con todas las pruebas quedó demostrado que Pablo no estaba vinculado en absolutamente nada y quedó totalmente desvinculado y libre”, agregó.
El crimen de Fernando ocurrió el sábado, alrededor de las 4.50, a la salida del boliche "Le Brique", en la avenida 3 y Paseo 102, en pleno centro de Villa Gesell, donde el joven estudiante de Derecho fue atacado a golpes de puño y patadas que le provocaron la muerte. Tras la brutal golpiza, una chica de 17 años llamada Virginia intentó practicarle al adolescente Reanimación Cardio Pulmonar (RCP). El lunes fue sepultado en el cementerio porteño de La Chacarita.
La fiscal que entiende en la causa no pudo establecer si este muchacho participó del ataque que culminó con la muerte del joven, ya que su defensa presentó pruebas, algunas de las cuales aún se analizan, de que Ventura estaba en Zárate, de donde es oriundo. A lo largo del martes, la fiscalía buscó probar la presencia de Ventura en Villa Gesell a través de la filmación de un auto que partió de una zona cercana a la vivienda donde se hospedaba el grupo de rugbiers, pero las grabaciones de cámaras de peajes no lograron confirmar que se trataba el auto de la familia Ventura.
Crimen en Villa Gesell | Imputaron a dos detenidos como coautores de homicidio
En las mismas aparece un vehículo que coincide con el modelo que maneja el padre del remero, José María, pero en ningún momento pudo confirmarse que el vehículo haya pasado por los peajes que conectan la ciudad costera con Zárate. También se comprobó que en el contrato de alquiler de la casa donde detuvieron a los diez deportistas figuraban los nombres de todos ellos menos el de Ventura.
Otra prueba determinante fue el video con el que la familia de Ventura aseguró que el joven había cenado con ellos en Zárate la noche previa al asesinato de Fernando. Al respecto, fuentes de la investigación indicaron hoy a TN que en un primer momento su padre aportó una copia de la grabación y por ese motivo, y para asegurarse de que el material no hubiese sido alterado, se envió a la Dirección Distrital de Investigaciones (DDI) de Zárate al lugar en busca del original y así lograron corroborar la coartada del acusado.
Este martes, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 6 de Villa Gesell, Verónica Zamboni, imputó a Máximo Thomsen, de 20 años, hijo de la secretaria de Obras Públicas del municipio de Zárate, Rosalía Zárate, y Ciro Pertossi, de 19, como "coautores" del homicidio de Fernando Báez Sosa. Los otros acusados son Matías Benicelli (20), Ayrton Viollaz (20), Máximo Thomsen (20), Luciano Pertossi (18), Lucas Pertossi (20), Alejo Milanesi (20), Tomás Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19) y Blas Sinalli (18).
DS