Pasaron 184 días desde la desaparición de Susana Cáceres (42) hasta que se llegó a detener al presunto femicida y abusador de la mujer en la localidad bonaerense de Moreno. Durante ese tiempo hubo pocos avances en la causa, hasta que desde la fiscalía decidieron hacer públicas, a principio de mes, unas imágenes de una cámara de seguridad donde se ve al sospechoso con la víctima y en la zona del crimen con el objetivo de que alguien lo reconociera y aportara la información necesaria para identificarlo. Y se logró. El jueves fue detenido “Yagui”, un changarín de 23 años como autor del femicidio.
A partir de esas imágenes, distintas personas fueron aportando información hasta que se llegó a identificar al sospechoso. Así Joel Ramiro Sosa fue detenido en la casa de su madre, situado en la calle 3 de Octubre al 2000, de Villa Udaondo, en el partido de Ituzaingó.
El acusado tiene 23 años, trabajaba como jardinero y en la feria donde también vendía en algunas oportunidades Susana. A esa feria se había dirigió la mujer la última vez que la vieron con vida, el 8 de noviembre pasado.
Sosa se había mudado a la casa de su madre el día anterior a la detención, pero antes vivía a unas siete cuadras del lugar en donde fue encontrado el cuerpo de Susana el 18 de noviembre, a pocos metros del camino del Buen Ayre y a la vera del río Reconquista en Moreno.
En los distintos allanamientos en el marco de la investigación, los detectives de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Moreno secuestraron una visera rosa que la mujer llevaba puesta el día de la desaparición y que Sosa se habría llevado como “trofeo” después del ataque.
También hallaron la bicicleta con una silla de niño similar a la que se ve al sospechoso en las cámaras conversar con la víctima y luego circular solo con la visera en la mano, como la que llevaba la mujer.
Sosa se negó ayer a declarar ante la fiscal Luisa Pontecorvo. La funcionaria judicial había ordenado difundir las imágenes de las cámaras el pasado 4 de mayo.
“Llegaron algunos mensajes mencionando a este hombre en grupos de Facebook creados con la consigna ‘Justicia por Susana’, y fueron el puntapié inicial para depurar las pistas y conseguir a los testigos que lo identificaron”, reveló a Télam uno de los jefes policiales que trabaja en el caso.
Incluso, se presentó un testigo que conocía a Susana y que dijo que la última vez que la vio estaba con ese hombre.
No es la primera vez, que optar por difundir las imágenes de los sospechosos permite esclarecer una investigación cuando quedan empantanadas.
Uno de los femicidios que se resolvió de esta manera fue el de la estudiante chilena Nicole Sessarego Bórquez (21) ocurrido el 15 de julio de 2014 en el barrio porteño de Almagro. Lucas Azcona fue identificado por su familia por la manera particular de caminar, luego de que la justicia difundiera una serie de videos en los que se lo veía perseguir a la víctima. Fueron ellos quienes lo entregaron a la policía.
Azcona fue condenado a perpetua por el crimen de Nicole, a la que atacó con una navaja cuando la chica quería ingresar al edificio en donde vivía. Este mes, también se logró identificar y detener a un ladrón de una joyería luego de la difusión de las imágenes de las cámaras del local.
“Ahora vengo, má”, le dijo Susana a Graciela Cardozo aquel último día. Le dejó para que le cuidara a su bebé, la menor de sus cuatro hijos. Pero Susana no regresó.
“Agradezco a Dios, era lo que más deseaba para que mi hija descanse en paz. Tengo una alegría enorme por toda la ayuda y el trabajo hecho. Mi corazón va a estar un poquito aliviado por mi bebita única, mí ‘Susita’”, expresó la madre de Susana.
“Lo único que quiero es llegar a la cruel verdad de qué fue lo que pasó con mi hija. Susi era mi vida, mi única hija, solo quiero la verdad y que se haga justicia para ella”, sostuvo Cardozo a Télam.
Los videos que ayudaron a la detención de Sosa fueron tres y tomados ese mismo día que se la vio por última vez. Uno de ellos captó a las 14.36 en la avenida Néstor Kirchner y calle Quiroga, al sospechoso a bordo de una bicicleta del tipo Mountain Bike de mujer con un asiento para niños en la parte trasera de color gris.
También se difundió un segundo video en el que se observa la misma secuencia desde otro ángulo, y luego un tercero de más de dos minutos de duración, que registra a la distancia al mismo sospechoso junto a su bicicleta caminando y conversando con la víctima, alrededor de las 19.10. Ahora quedará determinar si hay más pruebas que lo comprometan.
El caso del ‘Rubio’
En un poco más de tres minutos, “el Rubio” se llevó un botín millonario de alhajas, relojes y dinero de una joyería del barrio porteño de Palermo. El hecho ocurrió hace nueve meses y la imagen del asaltante había quedado grabada en una cámara de seguridad. Tras la difusión de las imágenes se logró identificarlo y atraparlo en la localidad balnearia de Mar de Ajó.
La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 19, a cargo de Martín Mainardi, había difundido a finales de febrero las imágenes del robo ocurrido el 22 de julio de 2022 para intentar recopilar datos que permitieran identificar al ladrón de joyas, ya que hasta ese momento no se había podido ponerle nombre y apellido.
Los investigadores llegaron hasta Mar de Ajó el 27 de abril último, luego de obtener un nombre: Lucas Antonio Radovich.
Así identificaron al sospechoso, de 49 años, que supuestamente sería el que entró a robar a la joyería de Palermo. El hombre quedó imputado por el robo en la joyería.