
A un mes del crimen de
Nora Dalmasso, los tres fiscales que investigan la
causa,
Javier Di Santo, Fernando Moine y Marcelo Hidalgo, se reunieron con el fiscal
general de la Provincia,
Gustavo Vidal Lascano, para analizar la marcha de la investigación.
“Fue una reunión de trabajo como lo hacemos habitualmente. Los fiscales han venido a
contarnos cómo marcha la investigación”, aseguró Vidal Lascano tras el encuentro en
declaraciones a radio LV2.
Por su parte
, Di Santo señaló que aún no se ha dado a conocer el
resultado de la contraprueba de ADN que el Ceprocor envió a la Fundación Favaloro,
mientras se ultiman los detalles para mandar las muestras al
FBI.
En tanto, Marcelo Marcarrón, viudo de Dalmasso, junto a su trilogía de abogados, podría tener acceso al expediente de la causa que investiga el crimen de su mujer, luego de presentarse la semana pasada como querellante particular del caso. Además se aguardan los resultados de las pericias de los teléfonos de la víctima.
Por otra parte, los investigadores apuntan ahora a
cinco sospechosos.
Un ex funcionario, un obrero, un empresario, un testigo y una
mujer son las cinco posibilidades que evalúan los investigadores a la hora de encaminar la
búsqueda de un responsable del homicidio.
En las últimas horas, tomaron fuerza dos nuevas versiones, según señaló
La Voz del Interior. Una de ellas apunta a
una mujer que viviría en el mismo barrio y sería la esposa de uno
de los amantes que Dalmasso habría tenido en su haber. Despechada y celosa por los encantos
de la víctima, habría encargado el crimen a un asesino a sueldo que habría perpetrado el hecho,
luego de que la mujer mantuviera sexo con otro hombre, o incluso luego de que él mismo tuvo
relaciones con ella.
Un testigo que ya declaró también está siendo investigado.
Para los pesquisas es llamativo que
este hombre se haya teñido el pelo. Relacionan esto al hecho
de que se haya encontrado
un cabello en la escena del crimen que no pertenece a
Dalmasso. Su nombre todavía no trascendió.
El primer nombre que se mencionó es el del único imputado en el caso, el ex funcionario
Rafael Magnasco. A tres días de conocerse el asesinato, ante
las insistentes versiones que indicaban que mantenía una relación sentimental con la víctima, el
hombre se presentó espontáneamente en la Justicia para que le extraigan sangre y le realicen un
estudio de ADN.
Magnasco quedó imputado como
“sospechoso leve” y no fue detenido.
Este jueves será indagado. Desde un principio, negó
vehementemente haber sido amante de Dalmasso. Con su caída, otros dos funcionarios renunciaron: se
trata del ex secretario de Seguridad,
Alberto Bertea y
Amadeo Nicolás Curchod, ex secretario de Faltas Gravísimas
del Tribunal de Conducta Policial, quienes compartieron con Magnasco un asado la misma noche del
crimen.
Otro de los sospechosos es
un poderoso empresario sojero, un ex rugbier apodado “El
Francés”, un hombre al cual se lo señaló como “organizador de fiestas swingers” y
como “un adicto al sexo fuerte”. Algunas versiones
lo vinculan sentimentalmente con la víctima y económicamente con el
viudo, Marcelo Macarrón.
La pista del obrero es una hipótesis que los investigadores no
descartan. El ex funcionario menemista, amigo del gobernador
José Manuel De la Sota y vocero del viudo de Dalmasso,
Daniel Lacasse, lo mencionó en más de una oportunidad.
De esta manera entran en la lista de sospechosos los múltiples operarios que participaron de
los arreglos en la casa de la víctima, los días previos al asesinato. Se presume que
alguno de los trabajadores, obsesionado con la belleza de Dalmasso,
se habría agazapado hasta ultrajarla en la soledad de la madrugada en la que la mujer resultó
estrangulada.
Sigue la investigación. Lacasse, abogado de Macarrón, junto
a
Rubén Tirso Pereyra y Benjamín Sonzini Astudillo, pidieron
constituirse como
querellantes en la causa. Hoy, los fiscales
Javier Di Santo, Fernando Moine y Marcelo Hidalgo decidirán
si les permiten o no tener
acceso al expediente.
Trascendió que los abogado de Macarrón reclamarán realizar
rinoscopías a los sospechosos, ya que los peritos indicaron que es
altamente probable que el asesino haya estado bajo el efecto de la cocaína, lo que
explicaría la ausencia de espermatozoides en el semen encontrado en el cuerpo de Dalmasso. La otra
posibilidad es que al hombre que tuvo sexo con la víctima se le haya practicado una
vasectomía.
Ante la ausencia de resultados de los estudios del Ceprocor,
los fiscales no descartarían recurrir al FBI
estadounidene, según informó
Telediario Digital de Río Cuarto o a un
prestigioso centro portugués, de acuerdo a lo publicado por
el diario
Puntal, de la misma ciudad.
Esta semana, llegarán los resultados de la
pericias sobre los llamados telefónicos que recibió e hizo
la víctima desde los dos celulares que el asesino se llevó de la escena del crimen.