El audio de la persecución policial en la colectora de la Autopista del Oeste refleja un dramatismo que la calidad de las imágenes del video no llega a mostrar. Se escuchan las detonaciones, las frenadas y los gritos desesperados de los policías que intentan detener la marcha de una camioneta.
"¡Estos nos quieren matar!", asegura uno de los efectivos que viaja en un móvil del comando de patrullas de Tres de Febrero. La persecución ocurrió anoche a la altura del puente Pellegrini, en la localidad de Ciudadela.
Los policías advierten el paso de una camioneta Jeep Renegade que tenía pedido de secuestro activo (había sido robada el sábado pasado en el partido de Ituzaingó, en jurisdicción de la comisaría 3ª) e inician una dramática persecución.
"¡Están efectuando disparos!", acusa el oficial que modula por radio solicitando apoyo. En el video se oyen las detonaciones y apenas se alcanza a ver la parte trasera de la camioneta que persiguen.
En los 2.30 minutos que dura el video de la cámara de seguridad del patrullero se escuchan al menos 51 disparos. "Tomá, hijo de puta", dice el efectivo que tira desesperadamente.
De acuerdo a las fuentes, la persecución termina en uno de los accesos al barrio Ejército de los Andes, conocido como Fuerte Apache, donde el conductor de la camioneta pierde el control y termina chocando contra un poste de luz.
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En el rodado viajaban tres sujetos, pero solo uno de ellos pudo ser detenido. Según voceros policiales, se trata de Gabriel Alejandro Fontana, un joven de 34 años con varios antecedentes por robo y un pedido de captura del Tribunal Criminal Nº 2 de San Martín.
Fontana no pudo salir de la zona porque tenía dificultades para caminar: había recibido un disparo de arma de fuego en el hombro por el que tuvo que ser asistido en la guardia del hospital Carrillo.
Los informantes añadieron que los delincuentes estaban apoyados por un auto Toyota Corolla desde el que aparentemente también dispararon contra los efectivos. Al igual que la camioneta, este coche había sido robado horas en Villa Sarmiento, partido de Morón.
Durante la persecución chocaron dos móviles policiales entre sí y una mujer policía sufrió una herida cortante por el roce de una bala. Por suerte, los dos oficiales que persiguieron a la camioneta resultaron ilesos.
La causa quedó a cargo del fiscal Pablo Ventrichelli, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 2 de Ituzaingó.
LNMC
