Fabián Gerardo Tablado, el hombre que en 1996 asesinó de 113 puñaladas a su novia Carolina Aló, recuperará su libertad este miércoles 15 de diciembre tras cumplir otra condena, en esta oportunidad por violar dos restricciones perimetrales en 2020.
Tablado, de 45 años, está preso en la Unidad 46 de José León Suárez, dentro del Complejo Penitenciario de San Martín, en la provincia de Buenos Aires. El último fallo lo condenó por dos hechos de "desobediencia" por no respetar las prohibiciones de acercamiento que tenía con sus hijas mellizas –por maltrato psicológico y amenazas– y con Edgardo Aló, el padre de Carolina.
Fabián Tablado fue filmado por las cámaras de seguridad del Municipio de Tigre el 19 de octubre de 2020, entre las 15.20 y las 17 horas. Allí se lo ve caminando con sus hijas mellizas por el puente Sacriste, ubicado en Avenida Libertador y Lavalle.
Según la fiscalía, el femicida desobedeció la resolución de la jueza de Familia Nº 2 de Tigre, Silvia Sendra, porque ese día pasó a 150 metros de la Dirección Nacional de Migraciones de Tigre, el lugar de trabajo del padre de Carolina Aló, cuando en realidad no podía estar a menos de 500 metros.
Este hecho ocurrió apenas meses después de que saliera en libertad el 28 de febrero de 2020, tras cumplir la condena a casi 24 años de prisión por el brutal femicidio de su novia Carolina, un crimen que conmocionó al país.
"Nunca tendría que recuperar la libertad. Es un psicópata peligroso que siempre se burló de las leyes, como lo hizo conmigo al violar la perimetral que le habían impuesto. Sólo nos queda cuidarnos de él", dijo a Télam Edgardo, el padre de Carolina.
Acusan a Tablado de violar la perimetral: “No fue una intención mala mía”
El asesinato de Carolina Aló y su historial de violencia
El femicidio ocurrió un 27 de mayo de 1996 en la casa de la familia Tablado. Aló, de entonces 17 años, estaba de novia con Fabián, de 20.
El ataque ocurrió en el domicilio de Tablado, localizado en Albarellos 348 de Tigre, cuando su familia no estaba. En una fuerte discusión, él persiguió a su pareja por toda la casa y la apuñaló 113 veces, con cuatro armas blancas halladas en la escena.
El juicio en su contra se realizó en 1998. La polémica giró en torno a lo planteado por la defensa de Tablado: sus abogados aseguraban que era inimputable y que debía considerarse a una pena reducida por haber actuado en “estado de emoción violenta”.
Por su parte, la fiscalía y querella acusaban al joven bajo la figura del homicidio agravado por alevosía, ya que por ese entonces no existía aún la calificación de femicidio. Los peritos concluyeron además que Tablado tenía una personalidad psicopática y que comprendió la criminalidad de sus actos.
La Sala III de la Cámara Penal de San Isidro condenaría a Tablado a 24 años por homicidio simple, evitando de esa manera la prisión perpetua. El asesino gozó de salidas transitorias en 2008 y 2011, revocadas en 2012.
Aquel año, la Cámara de Apelación y Garantías de San Isidro también le negaría la libertad condicional al tener en cuenta "su inestabilidad emocional". El femicida tuvo varias novias estando preso, e incluso en 2006 llegó a casarse en el penal de Florencio Varela.
Roxana Villarejo, con quien tuvo mellizas antes de separarse, lo denunciaría por maltrato psicológico y amenazas. En un juicio abreviado, que terminó el 21 de noviembre de 2013, se lo condenó a dos años y medio de prisión más, sumando 26 años y 6 meses.
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