Una escena escabrosa y un misterio viajaron de Santiago del Estero al Reino Unido. Donald Brooks, un científico de ese país que se había jubilado y vivía solo en una zona rural del norte de la provincia argentina fue encontrado muerto y su cuerpo desmembrado, informó hoy la policía local.
La ausencia del hombre de 74 años había sido advertida la semana pasada por la Embajada británica en Buenos Aires a autoridades policiales de Santiago, según se supo.
Además, trascendió que representantes de la sede diplomática del Reino Unido dijeron que hacía varios meses que el hombre no retiraba su jubilación, que era depositada en la sucursal del Banco Nación de la localidad de Joaquín V. González, en el sur de Salta.
Sin embargo, ambas cosas fueron desmentidas hoy por fuentes de la representación diplomática.
"No es cierto que la Embajada británica alertó sobre esto la semana anterior. Tampoco son ciertas las referencias sobre su jubilación, esa información no sabemos quién la brindó, pero no es así", aclaró una fuente oficial.
Asimismo, comentó: "estamos analizando los reportes de la muerte de un ciudadano británico en Santiago del Estero. Estamos en contacto con las autoridades locales".
"La Embajadora se ha comunicado esta tarde con el gobierno de la provincia de Santiago del Estero para manifestar el interés del gobierno bitánico en este caso. Nuestra vicecónsul viajará a la Provincia este fin de semana para poder trabajar lado a lado con las autoridades locales", acotó el vocero.
Las primeras pesquisas indicaban que el hombre habría muerto hace unos cuatro meses y la Justicia intentaba establecer si el deceso se produjo por causas naturales o fue asesinado durante un asalto.
El cuerpo habría sido desmembrado por animales salvajes, ya que se trata de una zona de monte muy aislada.
Los investigadores suponía que en la casa faltaban algunos bienes y, además, no se encontró dinero, aún cuando percibía mensualmente una importante suma de dinero como jubilación, lo que abonaba la hipótesis de un posible asalto, según reportó la agencia DyN.
Brooks, un físico y matemático británico, vivía desde hace casi dos décadas en una zona rural de Santiago, próxima a la localidad de Urutaú, en el límite con Chaco y a pocos kilómetros de la frontera interprovincial con Salta.
El hombre tenía poco contacto con los lugareños y su español era bastante limitado, comentaron los investigadores.
Asimismo, precisaron que la pesquisa se inició porque personal de Vialidad Nacional, que realizaba tareas de desmalezamiento en la ruta nacional 16, en cercanías de Urutaú, encontraron un cráneo humano.
Entonces, dieron aviso a la comisaría 22a. de Monte Quemado, a 27 kilómetros de donde se produjo el hallazgo, que comenzó a buscar el resto del cuerpo, hasta que lo localizó en el patio de una vivienda cercana, que resultó ser la de Brooks. Pero allí sólo se halló el torso, que vestía una camisa y una campera raídas.
El estado de abandono en que estaba el lugar, dijeron las fuentes, indicaba que hacía mucho tiempo que el hombre había fallecido.
Los restos fueron trasladados a la morgue judicial de la ciudad de Santiago del Estero para la realización de la autopsia a fin de revelar la causa de muerte.