Dos presuntos motochorros venezolanos fueron detenidos acusados de atacar a tiros a un gendarme y asaltar a un concejal en un medio de un raid delictivo ocurrido en la localidad bonaerense de Rafael Castillo, en el partido de La Matanza.
Según fuentes policiales, José Alonzo (21) y Ezequiel Tiapa (29) están acusados de formar parte de una banda compuesta por al menos seis delincuentes (se cree que todos ellos serían de la misma nacionalidad) dedicada a robar autos y motos en la zona oeste del conurbano bonaerense.
Los sospechosos fueron arrestados a bordo de una moto marca Gilera VC 150 de color Gris en la avenida Cristanía y Habana, en la localidad de Isidro Casanova, a unas treinta cuadras del lugar del hecho.
De acuerdo a las fuentes, dieron con ellos en base a los datos aportados por los testigos y el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona. Por esa razón, el fiscal Carlos Arribas, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción Judicial (UFIJ) N°12, pedirá el procesamiento con prisión preventiva por los delitos de "robo agravado, tentativa de homicidio y portación ilegal de arma de fuego de uso civil".
Los dos ataques ocurrieron en la misma manzana. En Settino y Eufrates, redujeron a un concejal y le robaron su camioneta VW Amarok. A la vuelta, sobre Settino, se toparon con Hugo Feliciano Martínez, un sargento de Gendarmería Nacional Argentina (GNA) de 41 años. Le quisieron robar su moto pero el efectivo se negó e intentó ponerlos en fuga.
Los voceros señalaron que Martínez no alcanzó a tirar porque antes le dispararon a quemarropa. Después, le quitaron su pistola reglamentaria, una 9mm con el cargador completo, y se llevaron su moto.
El sargento, que presta servicio en el Edificio Centinela, fue trasladado en un patrullero hasta el Hospital Paroissien, donde los médicos que lo asistieron confirmaron que tenía una herida de arma de fuego con orificio de entrada y salida a la altura del tórax. Según el parte médico, la bala no afectó "ningún órgano vital" y actualmente se encuentra estable y fuera de peligro.
Los agresores escaparon en distintas direcciones y, hasta el momento, solo dos fueron arrestados. Tiapa y Alonzo iban en una misma moto pero solo el primero de ellos estaba armado. Según las fuentes, llevaba un revólver calibre 32 largo, marca La Porteña, con cinco municiones intactas.
Alonzo, que hasta hace unos meses trabajaba en una empresa de telecomunicaciones, tiene doble nacionalidad, mientras que su presunto cómplice no tenía documentación al momento de ser demorado por la Policía.
LN