Ayer, a las 5.20 de la tarde, Juan Romero le mandó un SMS a su ex esposa, que rezaba: "No vas a ver más a tus hijos". Unos 20 minutos después, la mujer, y madre de dos mellizos de siete años, realizó la denuncia en los Tribunales de Concordia, provincia de Entre Ríos. Pero ya era tarde: para ese momento, uno de sus hijos estaba muerto y el otro permanecía en coma, al igual que su exmarido.
Romero condujo su automóvil Chevrolet Corsa por la Ruta Nacional 14 y -a la altura del kilómetro 242, cerca de Puerto Yeruá- chocó contra un camión Scania. Uno de los hijos, Agustín, murió; Mateo aún está internado, pero ya salió del coma.
El hombre, de 41 años, circulaba rumbo sur cuando volanteó a la mano contraria chocó de frente contra el camión. El chofer del Scania confirmó en su testimonio que el auto lo embistió directamente. Los chiquitos salieron despedidos del auto y quedaron tendidos en la ruta.
Romero y la madre de los niños estaban separados: él debía pasarlos a buscar esa tarde y llevarlos a la casa de su ex. En el camino tomó la decisión de "vengarse" con la muerte de sus hijos y después quitarse la vida.
Sin embargo, tanto Romero como Mateo salieron del coma y evolucionan. "Tanto el chiquito como su padre tienen una contusión pulmonar, por eso están con respirador”, explicó el doctor José Luis Siggiotti, director médico del hospital Delicia Concepción Masvernat.
“Estaban en coma, empezaron a despertar a moverse y todo eso indica una evolución favorable. Es decir, saliendo del estado de coma que es importante. De todos modos están en terapia”, completó el médico en diálogo con el diario Río Uruguay.
"El hombre mayor tiene fractura de pelvis, el chiquito tiene fractura en uno de sus brazos, en su pierna y traumatismo pulmonar. El cuadro de los dos sigue siendo delicado pero han tenido una evolución favorable con respecto al ingreso de ayer", concluyó Siggiotti.
