En la última semana en la ciudad de Paraná de la provincia de Entre Ríos se produjeron varios episodios de violencia: una decena de viviendas fueron incendiadas y al menos cuatro personas fueron baleadas o golpeadas. Los ataques se perpetran a gente acusada o sospechosa de ser ladrones. Las autoridades sostienen la teoría que los ataques son llevados a cabo por un grupo de personas que sale a las noches a la calle para constituirse en “vengadores anónimos” cuyo objetivo es castigar a los delincuentes.
Este grupo violento bautizado como “Los Dragones” por su tendencia a cometer incendios, es sospechoso de haber participado de un episodio en el que balearon a dos hombres y golpearon a otros dos el pasado fin de semana en la capital de la provincia de Entre Ríos. También se cree que podrían haber sido los autores de los incendios a 10 casas de vecinos de la periferia paranaense a los que se sindica como ladrones.
Según informó el portal Río Litoral Noticias, el jefe de la Departamental Paraná de la Policía de Entre Ríos, Ricardo Frank, califico de “llamativo” el hecho de que varias personas que son sospechosas de robos de motos, asaltos o hurtos fueran internadas por disparos en las piernas o golpes recibidos en extrañas circunstancias.
"Las personas atacadas contarían con antecedentes penales y recibieron balazos en las piernas o golpes que no fueron aplicados con intención de matarlos, sino aparentemente con la finalidad de amedrentarlos", informaron fuentes policiales. Asimismo, detallaron que "ninguno de los heridos aportó detalles de las circunstancias en las que fue atacado, aunque estamos convencidos de que sucedió en situaciones vinculadas a su accionar ilegal".
Algunos de los casos divulgados por el citado portal de noticias sería un incidente acaecido el viernes pasado, cuando dispararon a un joven de 22 años en el fémur después que los vecinos lo acusaran de haber robado en una heladería. El chico apareció herido a pocos metros del local con el monto que había sido sustraído.
Otro episodio parecido sucedió durante el fin de semana. Dos jóvenes que supuestamente se disponían a robar una motocicleta fueron interceptados por un grupo de personas que los golpeó. Ambos tuvieron que ser internados por los fuertes golpes y la pérdida de algún diente.