El miedo y la dramática situación que se vive con la inseguridad jugaron un papel determinante en el triste final del joven colombiano Cristian Martínez Rodríguez, de solo 17 años, que fue baleado por un vecino del barrio de Almagro que creyó que tenía intenciones de robo. La presencia de Martínez Rodríguez en la terraza de una casa de Gascón caso avenida Córdoba se debía, según contaron sus familiares, a que había estado pintando grafitis en una pared lindera, en horas de la madrugada, y cuando se retiraba el vecino lo confundió con un ladrón hiriéndolo mortalmente.
Los acompañantes del chico baleado huyeron a la carrera, algunas versiones indicaron que el vecino también les habría disparado sin alcanzarlos, pero Martínez Rodríguez no tuvo esa suerte y cayó exánime en la vereda de la casa de Gascón 1075. "Solo estoy pintando grafitis, no estoy robando", le habría gritado el joven colombiano al morador de la casa, de apellido Arbaje, pero este le disparó y uno de esos balazos dio en el cuello, causándole a Martínez Rodríguez una herida letal. El joven cayó a pocos metros y su hermana Julia contó que en el Hospital Durand le dijeron que el cuerpo de Cristian presentaba "tres heridas de bala", lo que no pudo ser confirmado. "Me dijeron que la herida mortal fue en la yugular derecha, pero que no era la única, que le habían dado dos tiros más", indicó la hermana de la víctima, indicando que había 3 años habían venido a radicarse a la Argentina, y que Cristian trabajaba en una peluquería. El joven llegó al Hospital Durand agonizando y murió pocos minutos antes de las 6 de la mañana.
Interviene en el caso el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°31, que instruye actuaciones por homicidio y Arbaje premanece detenido en la Alcaidia de Tribunales, hasta tanto se decida su situación procesal.
