A Manuela Castañeira, candidata a diputada en PBA por el Movimiento Avanzada Socialista le preguntaron en el programa de Chiche Gelblung cuántos votos necesita para entrar al Congreso en estas elecciones 2025. “420”, respondió, por 420.000 mil. La sonrisa surgió espóntanea y disparó el video para redes.
“Ya sabés, este 26 de octubre tenés que votar a Manuela Castañeira, necesitamos 420 para que sea diputada y se prenda el Congreso”, dice la presentadora del video.
En “se prenda” se encienden unos fueguitos. Dos segundos antes, en “420” habían volado las hojitas de la fisonomía inconfudible.
La presentadora al final guiña el ojo. Porque se trata de eso, un guiño. 420 es un número que en la cultura cannábica se refiere originalmente a un horario especial para consumir marihuana; el de las 4:20 PM.
420 hoy funciona como una contraseña mundial del uso de marihuana y todos los 20 de abril (20/4) a las 4.20 de la tarde los usuarios suben a las redes una cantidad masiva de mensajes alegóricos.
Seguramente tenga que ver con el corte del electorado al que apunta el Movimiento Avanzada Socialista, el nombre formal para estas elecciones del Nuevo MAS, una de las expresiones electorales de la izquierda argentina. Es la única que no está integrada al Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad que tiene como figuras más conocidas a Myriam Bregman y Nicolás del Caño. Cuando se habla de una supuesta falta de unidad de la izquierda, desde el FIT-U sostienen que con su espacio (en el que confluyen varios partidos y organizaciones) es suficiente para repesentarla. Un argumento está en los resultados de las elecciones, donde la diferencia de votos entre un propuesta y otra es clara.
En lo subjetivo, mientras el FIT-U apunta a un público más diversificado, el Nuevo MAS tiene un perfil más “juvenilista”. Las universidades son las locaciones más habituales de sus recorridas y hace unos meses llamaron la atención con una actividad llamada “Campamento Anticapitalista”. Sobre ese evento, entre las reacciones en las redes sobresalió la del vocero presidencial Manuel Adorni, que en tren de chicana le dedicó varios posteos, alguno de ellos de tono hasta "compinche". “Es para Adorni que lo mira por IG” pasó a ser dede entonces un estribillo habitual de los militantes para engancharse con el volumen digital que suelen alacanzar las intervenciones del funcionario en las redes.
Si la democracia tiene acento extranjero seguimos pensando como colonia
Otro tema que logró instalar el espacio es el salario mínimo de 2 millones de pesos. Ante la críticas sobre un posible inviabilidad, la candidata argumenta que son el único espacio que habla en numeros concretos sobre los ingresos de los trabajadores.
El posteo del 420 acumuló una mayoría de comentarios negativos. Pero las interaacciones suman y eso es parte de las reglas.
LT