Los estudiantes de Catamarca, La Rioja, La Pampa, Santiago del Estero y Chaco tendrán menos de 180 días de clase este año, según lo establecido por los calendarios escolares provinciales. La ley exige ese mínimo desde 2003. La suma de feriados nacionales, provinciales y vacaciones impide alcanzar el objetivo
En 2021 se incumplirá el mínimo de 180 días de clase en las escuelas primarias de Catamarca (178 días), La Rioja (177 días), La Pampa (177 días), Santiago del Estero (173 días) y Chaco (171 días). En estas cinco jurisdicciones, el calendario escolar prevé menos días de clase que los exigidos por ley, si se tienen en cuenta los feriados y vacaciones.
Los datos surgen del informe “¿Los calendarios escolares provinciales prevén 180 días de clase en 2021?”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Gustavo Iaies, director de la escuela de Gestión Educativa de Eseade; Víctor Volman y Federico Braga.
En las provincias mencionadas, la propia planificación de los calendarios escolares jurisdiccionales incumple la Ley 25.864, que desde 2003 establece un ciclo lectivo anual de al menos 180 días efectivos de clase para el nivel primario. A esto habría que sumarle los días que luego se puedan perder por diferentes causas, como cuestiones vinculadas con el desarrollo de la pandemia, problemas edilicios, paros docentes o factores climáticos, etc.
Las cifras surgen de contabilizar la cantidad de días de clase previstos de acuerdo al inicio y finalización del ciclo lectivo en cada provincia. De este total se restaron los feriados nacionales (incluyendo los feriados puente), los feriados provinciales y el receso invernal.
En el otro extremo, Ciudad de Buenos Aires (196 días) es la jurisdicción que prevé más días de clase, seguida de Jujuy (190), Tierra del Fuego (189), Provincia de Buenos Aires (188) y San Luis (187). “Los días de clases pueden empezar a plantearse como un primer indicador vinculado a la calidad de los aprendizajes en el sistema. El ciclo lectivo 2021, con preponderancia –por lo menos en una primera etapa– de la enseñanza bimodal (virtual y presencial) nos puede ayudar a pensar nuevas formas de medir y pensar los aprendizajes”, plantea el informe. Y agrega: “Más allá del cumplimiento de días de clase, sería conveniente fijar metas de cumplimiento de aprendizajes”.
En el otro extremo,
la Ciudad de
Buenos Aires es
la que prevé más
jornadas de estudio
“Es interesante habilitar la discusión acerca de las razones por las cuales la cantidad de días impacta sobre los resultados de aprendizaje de los alumnos. Esto implica discutir cómo se define esa cantidad, una definición que no parece estar dada en Argentina. Necesitamos definir la duración de un ciclo y lo que pedimos del mismo en términos de resultados. Esos acuerdos nos permitirán avanzar hacia adelante”, afirma Gustavo Iaies, coautor del informe.
“La Ley 25.864 plantea que, ante el incumplimiento del ciclo anual mínimo, deberían ser las autoridades educativas provinciales las encargadas de adoptar las medidas necesarias para compensar los días de clase perdidos hasta completar los 180. El presente informe muestra claramente cuál es el piso máximo de días de clase previsto por calendario para todos los niños y jóvenes argentinos. En varios casos, no se ajusta a lo que exige la ley. La realidad estaría indicando que en varias provincias se están previendo menos espacios de interacción real para que los alumnos avancen en sus saberes”, advierte Mónica Prieto de Stantien, decana de la Escuela de Educación de la Universidad Austral.
“El valor del tiempo que los alumnos van a clase es relativo en cuanto a la calidad de los aprendizajes que se adquieren en su transcurso”, asegura Guillermina Tiramonti, investigadora de Flacso. “De todos modos, el uso del tiempo expresa más que cualquier otro elemento las prioridades de una vida individual o comunitaria. Por lo tanto, es válido pensar que existe una correlación entre el tiempo que una comunidad le otorga a la educación y la valoración que hace de ella. En la Argentina pareciera que nos falta avanzar en la apreciación de la importancia que tiene la educación para la formación de las nuevas generaciones”.
Si se consideraran las jornadas institucionales previstas, serían 10 las provincias que no alcanzarían los 180 días de clase: se suman Misiones (179 días), Neuquén (179), Santa Fe (179), San Juan (178) y Formosa (177). De todas maneras, es difícil determinar la incidencia de las jornadas, dado que la situación varía entre provincias e incluso entre escuelas. Hay casos en los que las jornadas implican pérdida de clases y otros en los que no.
Más allá de las cifras del informe, es probable que en muchas escuelas haya incluso menos días de clase, ya que los datos no contemplan el Día del Empleado Público (que en algunas provincias implica suspensión de clases), ni otras festividades locales como aniversarios municipales.