El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, afirmó hoy que "bajo ningún punto de vista" el Gobierno nacional aceptará que un miembro de la Policía Federal "levante una mano para lastimar a alguien" e incluso aseguró que, los uniformados que lo hagan, "será expulsados", en alusión al caso de desalojo de Villa Soldati.
"Bajo ningún punto de vista nuestro Gobierno va a aceptar que una fuerza de seguridad levante una mano para lastimar a alguien", aseguró Fernández durante un diálogo con estudiantes universitarios en La Plata. Tras considerar que en el episodio de Villa Soldati "todo esto está visto por televisión", advirtió que "serán expulsados de la Fuerza" los agentes que repriman.
Fernández también repudió los conceptos que formuló el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, en relación a los incidentes en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires y la política inmigratoria. "No apuntamos a los extranjeros, como acaba de hacer el jefe de Gobierno porteño", se diferenció Fernández en la charla informal con jóvenes en la La Plata. En una conferencia de prensa que dio esta mañana, Macri se quejó de la "inmigración descontrolada" que sufre la Ciudad y pidió ayuda a la presidenta Cristina Fernández ante "el avance de la delincuencia y el narcotráfico".
Fuente: DYN