El juez federal Claudio Bonadio tomó licencia de su cargo a partir del próximo miércoles 1º de mayo. El período se extenderá hasta el 15 de mayo, fecha en la que el magistrado que investiga la causa de los cuadernos de las coimas se reintegrará al despacho que ocupa desde la década del 90, cuando llegó desde la Secretaría Legal y Técnica del Ejecutivo, en tiempos del menemismo. Según pudo saber PERFIL, la licencia sería para realizarse estudios médicos. Bonadio tiene 63 años y hace uno comenzó la investigación que revolucionó la escena política y empresarial actual.
La decisión de Bonadio se conoció apenas un día después de que ampliara el procesamiento contra la ex presidenta Cristina Kirchner, en el marco de los cuadernos de las coimas. Se trata del caso más importante de la historia de la investigación de presuntos hechos de corrupción en la Argentina, en el que la ex mandataria está acusada de ser jefa de una asociación ilícita que operó en el país en torno de la obra pública entre 2003 y 2015.
También se conoce poco después de que la Cámara de Apelaciones se expidiera sobre un tramo del caso que había llegado a esa instancia de revisión y le ordenara, entre otras cosas, la rápida elevación del caso a juicio. Los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi encomendaron al magistrado “la inmediata elevación a juicio de los tramos ya concluidos” de la investigación en primera instancia.
Bruglia y Bertuzzi le encomendaron también a Bonadio que apure la resolución de cuestiones pendientes, como el pedido de sobreseimiento de Máximo Kirchner, y le pidieron que profundizara las líneas de investigación sobre varias empresas, entre ellas Perales Aguiar SA, Cartellone SA, Juan Carlos Relats SA y el Grupo Eskenazi. Precisamente sobre los Eskenazi y el Grupo Petersen, de su propiedad, los jueces ya habían recomendado que Bonadio profundizara la investigación. Fue a fines de diciembre pasado, cuando la Cámara resolvió sobre buena parte de lo dispuesto por el juez hasta entonces. Sin embargo, a pesar del señalamiento, no hubo novedades en el caso aún.
A su vuelta al despacho de los tribunales de Comodoro Py, Bonadio volverá a abocarse a la causa que comenzó con los cuadernos del ex chofer Oscar Centeno y que tiene entre sus procesados, además de a la ex presidenta y al ex ministro de Planificación, Julio De Vido, a empresarios de la talla de Carlos Wagner, Angelo Calcaterra y Juan Chediak, entre otros, y al financista Ernesto Clarens y al ex contador Víctor Manzanares, uno de los principales arrepentidos en el caso.
