La guerra de espías no cicatrizó con la nueva conducción macrista. Todo lo contrario. El caso Gómez Centurión y los negociados en la Aduana demuestran que lo peores vicios de la Inteligencia siguen activos. En ese sentido, la diputada nacional Elisa Carrió presentó un paquete de leyes que impulsan la derogación de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y la creación de una agencia federal contra el crimen organizado, la federalización de los delitos de narcomenudeo y la federalización de los delitos de torturas.
El paquete de propuestas fue presentado luego de compartir ayer un asado con el presidente Mauricio Macri en su quinta Los Abrojos con quien dialogó "en buenos términos" sobre su apoyo al extitular de la Aduana Juan José Gómez Centurión, el "tarifazo" y el paquete de leyes para la lucha contra el crimen organizado.
Carrió ya había cuestionado en varias oportunidades las designaciones de Gustavo Arribas y Silvia Majdalani al frente de la AFI. "Se propone una reforma integral de la seguridad federal para la eliminación de los nichos de corrupción y la connivencia entre el poder político, la policía y la delincuencia, mejorando la efectividad de las acciones preventivas e investigativas", argumentó Carrió.
En principio, la legisladora promueve un proyecto que deroga la ley nacional de inteligencia y la ley que creó la Agencia Federal de Inteligencia, aprobadas durante el gobierno de Cristina Fernández cuando el kirchnerismo tenía la mayoría en el Congreso.
Según lo argumentado por la diputada, la norma puesta en marcha en marzo de 2015 genera "las más graves violaciones a los derechos y garantías de los ciudadanos garantizadas en la Constitución Nacional, facilitando el desarrollo del crimen organizado".
En un comunicado de prensa se informa que el proyecto presentado por Carrió crea, por un lado, "el Sistema de Inteligencia Nacional" y, por el otro, y separado de este, "el Sistema Nacional de Investigación con el objeto de luchar contra los delitos federales de terrorismo, narcotráfico, sedición, tráfico de armas, tráfico de divisas, tortura, tráfico y trata de personas".
"También se incrementan las funciones y atribuciones del control parlamentario a través de la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia e Investigación", sostuvo.
Carrió, además, propuso que dentro del Sistema de Inteligencia se cree la Dirección Nacional de Inteligencia de la República Argentina, que dependerá directamente del Ejecutivo, la que procesa, analiza e interpreta la información de fuentes abiertas.
En este punto, la diputada aclaró que esta dirección "no contará con medios propios de reunión de información ni de investigación, como hasta ahora tenía la AFI, y prohíbe, a su vez, el agente encubierto".
Asimismo, impulsa la creación de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal, dependiente del Ministerio de Seguridad, a fin de proporcionar a las Fuerzas de Seguridad la inteligencia oportuna para la prevención del delito y para auxiliar la ejecución de investigaciones.
En este paquete de propuesta, la diputada también prevé la creación de la Agencia Nacional de Investigación del Crimen de la República Argentina, dentro de la órbita del Sistema de Investigación.
Dentro de este organigrama se prevé la creación de una Dirección de Integración y Operaciones de Agencias Estatales, con la capacidad de coordinar la inteligencia disponible en el Sistema de Inteligencia Nacional; el Departamento de Delitos Federales, como órgano propio de coordinación principal con el Departamento Narcotráfico y Crimen Complejo de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal y el Departamento de Narcotráfico de la Dirección General de Aduana.
Como parte de la reforma de la ley de Inteligencia, Carrió también proyectó crear la Fuerza Especial de Investigaciones, que dependerá de la Agencia de Investigación, que tendrá un núcleo inicial de personal especializado en investigación de las Fuerzas de Seguridad y Policiales Federales, Migraciones, Dirección General de Aduanas y de otras áreas del Estado que disponga de especialistas en investigación.