El juicio por la Obra Pública conocido como Causa Vialidad transita su recta final. Antes de definir el veredicto, el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N°2 comenzó a escuchar las últimas palabras de los acusados y mañana martes 29 de noviembre es el turno de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Acusada de ser jefa de una supuesta asociación ilícita que buscó favorecer al empresario Lázaro Báez con contratos de Obra Pública en la provincia de Santa Cruz, la titular del Senado tiene un pedido de condena a 12 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Viene, en ese contexto, de asegurar públicamente que la sentencia ya está escrita y derribar los argumentos expuestos por los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola.
De acuerdo al cronograma diseñado por el Tribunal, mañana desde las 9:30 se llevará a cabo una nueva audiencia en el marco del juicio para avanzar en la segunda tanda de "últimas palabras". Es por eso que entre los defensores y los acusados reina un clima de fuerte expectativa por las condenas pero también de despedida ya que son las últimas audiencias luego de casi cuatro años de proceso.
La vice tendrá la posibilidad de pronunciar sus últimas palabras junto al ex funcionario de Vialidad Provincial de Santa Cruz Héctor René Garro, el ex integrante del Ministerio de Planificación Carlos Kirchner y el ex secretario de Obras Públicas, José López. La audiencia se llevará a cabo de manera mixta: se prevé que los jueces Jorge Gonini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso la encabecen de manera presencial mientras que los defensores y los acusados lo hagan a través de Zoom.
La última vez que la vicepresidenta habló ante los jueces del TOF que la juzgan en el juicio de la obra pública fue el 23 de septiembre pasado, cuando esgrimió fuertes cuestionamientos contra la acusación de Mola y Luciani, probó que muchos de los hechos que le imputaron no existieron -como una supuesta reunión con Báez- y denunció que sus garantías constitucionales "están suspendidas desde el 10 de diciembre de 2015".
De todos modos, no está confirmado que hable y en su entorno se mantienen con fuerte hermetismo ante las consultas al respecto.
Últimas palabras: hablaron Báez y De Vido
Uno de los primeros en exponer el viernes pasado fue Lázaro Báez. El empresario ex dueño de Austral Construcciones utilizó menos de un minuto para agradecerle a su defensa a cargo del abogado Juan Villanueva "que se ha expresado con claridad a lo largo de todo lo que ha sido este tiempo en el que estuvimos privados de la libertad".
Además, valoró que su abogado "ha sido muy claro a lo largo de todo el proceso" y que gracias a ello "se expuso la verdad y la realidad". Hizo extensiva su valoración al resto de las defensas.
El empresario santacruceño acusado por corrupción tiene sobre sí un pedido de condena a 12 años de prisión por parte del Ministerio Público Fiscal, representado por los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola. Ambos representantes estuvieron presentes en la audiencia.
Después de Báez, el juez Gorini le pidió la palabra a los ex funcionarios de Vialidad Nacional en Santa Cruz Mauricio Collareda y Raúl Daurich. El primero tomó la palabra para decir que no tenía nada más para agregar mientras que el segundo hizo un desarrollo breve en el que aseguró que "el pedido de condena es extemporáneo".
Desde 2004, Cristina Kirchner recibió más de 650 denuncias judiciales
Después llegó el turno de De Vido, el que hizo una exposición más extensa en la que recordó que es la tercera vez que participa de las últimas palabras de un juicio, repasó los procesos anteriores, defendió su gestión y le habló al Tribunal. "Tienen una tarea difícil: deben elegir entre una condena inmoral o el Estado de Derecho", dijo.
El ex ministro clave de Néstor y Cristina Kirchner dijo que "es la tercera vez que para imputarme utilizan informes mediáticos y marketineros" y afirmó: "No hubo direccionamiento de la Obra Pública. Todas y cada una de las obras se definieron y planificaron en el marco del consejo federal de planificación, integrado por todas y cada una de las provincias, cubriendo las asimetrías del país".
"Deben elegir entre una condena inmoral o el resguardo del Estado de Derecho. Espero con firmeza que vuelva la vara de la Justicia con el antifaz y la mudez, que deben ser los valores a mantener", manifestó.
Por último, De Vido calificó negativamente las acusaciones. "Siempre han sido insostenibles, injustas", cerró.
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