POLITICA
SEMANA 33

Cedió el dengue, amainó la gripe, pero habemus populismo

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Cedió el dengue. Amainó la gripe. Pero habemus populismo. No se fue nunca. Le dio por sincerarse "a lo bestia". Promete. Llora. Caretea de social. Es la forma más artera que tiene la derecha para hipnotizar y hacer pasar su verso por izquierda. Se trata de dejar lo podrido como está y darle cuerda al reparto nacional de sahumerios.

Pasados 40 inocuos días y a 120 de lo que se sueña será la reconquista del Congreso, un mal olor desprende la blindada fortaleza rosada de Balcarce 50. A los votos de junio se los llevó el Pampero y sólo una fuerza política decide por todas. Hay Unicato del peor. Lo advirtió (y avisó) Carrió pero otra vez (como la mesa de Enlace tantas) la oposición cayó en el lazo y salió del Palacio como vino. Cuesta creer que todavía crean que Kirchner quiera (y sepa) dialogar. El empecinado Señor Statu Quo no afloja riendas. Y la Señora Presidenta no ceja de "fusilar" a las audiencias que le pongan con mensajes que van de la paranoia al galimatías tipo "Es obvio señalar que el desarrollo continuo de distintas formas de actividad cumple un rol esencial en la formación de toda una serie de criterios ideológicamente sistematizados en un frente común de actuación regeneradora".

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Tampoco al K consorte le importa ser entendido. A sus ráfagas verbales las cruza una bronca vengativa que tampoco le justificaría su curriculum. Leuco lo sinceró esta semana poniendo al aire una entrevista de 1998 donde K confiesa orondo haber sufrido 7 (sic) encierros bajo la dictadura, sin que ninguno fuera cierto (vaya temazo para un simposio de la Carta Abierta) Ese es K. El que se impone por omisión de lógica y sentido. El que retorna al primer plano mas hiperpopulista y avaro que nunca. Poco le dolió el frenazo del 28 de junio. Amagó, se enroscó unos días en el serpentario de Calafate, armó otro plan y volvió a Olivos más bífido que nunca. "El fútbol es más que el peronismo" secreteó, y transmutó la famosa opción del 45 en "Goles sí, libros no", flamante idea fuerza con la que especula resurgirá radiante.

Quintaesencia del mejor populismo. Decir una y hacer otra. ¿Por qué sobresale otra vez? Porque le dejamos construir poder desde la confusión que provoca. Kirchner marca el camino que le dicta su ego para sucederse per se (o por interpuesta persona) en 2011. Solo él, nadie (salvo la tonante e incomprendida Carrió) está en lo que su naturaleza está. En joder, uno. En dar aviso, otra. Unicos dos líderes que destacan en "el desierto de los tártaros" en el que sobrevivimos boqueando. En país en bolas. En república en coma. Con oposición en babia y gobierno matón. Peor no nos podría ir. Leyes fraguadas. Dramas por corrupción en serie. Mega negocios bajo cuerda. Mini proyectos vacuos. Obras fantasmales. Y el Sublime Indec Viento en Popa.

Lo cierto es que ya no somos una comunidad. Sí, una Gran Olla Podrida donde se macera (para peor, desde hace décadas) el triste y deshilachado Ser Nacional. Nuestra actualidad vegeta. No crece. Si al menos hubiese una única buena noticia. La que sobresale esta Semana 33 es más que infamante. Los 600 millones que invertirá el gobierno en anestesia futbolística le proveerían durante 10 años la alimentación (y por tal, la vida) a esos 165.000 niños invisibles a nuestros ojos. Los desnutridos.

(*) especial para Perfil.com