La Confederación General del Trabajo (CGT) y las dos Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) formaron una alianza momentánea con los movimientos sociales como Barrios de Pie para acompañarse mutuamente en sus respectivas marchas del 15 y 21 de este mes.
Las Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y Barrios de Pie acordaron con las principales centrales de trabajadores del país. El acuerdo se oficializó en una asamblea que los movimientos realizaron en la sede de la CTEP, ubicada en el barrio porteño de Constitución.
La reunión contó con discursos muy críticos contra el Gobierno pronunciados por Juan Grabois (anfitrión), Juan Carlos Schmid (CGT), Pablo Moyano (Camioneros), Pablo Micheli (CTA Autónoma), Sergio Palazzo (Corriente Federal), Hugo "Cachorro" Godoy (ATE) y Roberto Baradel (SUTEBA), consignó la agencia Noticias Argentinas.
"Va a haber unidad en la calle: el 15 vamos a estar con ustedes y el 21 ustedes van a estar con nosotros. Vamos a la unidad de los trabajadores y los compañeros desocupados", sostuvo Pablo Moyano al tomar la palabra durante el encuentro frente a los dirigentes y afiliados de las tres organizaciones sociales.
Antes de la marcha motorizada por Camioneros a la 9 de Julio luego de que se profundizara el conflicto entre la familia Moyano y el Gobierno, el 15 se realizará en La Plata la marcha de las movimientos sociales, por el reclamo de la Emergencia Alimentaria, también para pedir que se empiece a implementar el tramo 2018 de la Emergencia Social y que el 25% del presupuesto de la obra pública de la provincia de Buenos Aires se destine a las cooperativas.
El encuentro fue convocado por el líder de la CTEP, Grabois, quien en la previa había planteado la necesidad de acordar apoyos mutuos antes de definir la adhesión de su organización a la marcha del 21, de la que no participarán los grandes gremios de la CGT, entre ellos los de los "gordos", los de los "independientes" y los del transporte.
Pablo Moyano pronóstico una multitudinaria marcha el 21 de febrero. "Será como el 29 de noviembre cuando le frenamos la reforma laboral a este gobierno de ricos", manifestó. Mientras que también tuvo tiempo para fustigar a "esos sindicalistas arrastrados (por los que no irán a la movilización) que por dinero o prebendas le hacen el juego a este Gobierno que busca ponernos de rodillas".
Por su parte, Grabois garantizó que "miles de trabajadores de la economía popular estarán codo a codo tanto el 15 como el 21 de febrero", al tiempo que le pidió a los dirigentes cegetistas "que incluyan en sus reclamos a ese tercio olvidado de trabajadores que casi en situación de esclavitud tienen que trabajar en muchos municipios por una retribución miserable de 4 mil pesos".
A su turno, Baradel llamó a todos los sectores reunidos allí que quieren activar un plan de lucha contra el Gobierno a concretar una "confluencia en una sola expresión, en una sola central" y agregó: "Tenemos que hacerlo para que la reforma previsional se derogue".
Palazzo denunció que el macrismo "busca quebrar la unidad popular", por lo cual exhortó a encarnar "el frontón de resistencia a las políticas neoliberales del Gobierno".
Micheli, en tanto, insistió en la necesidad de ir hacia "un paro general" si el oficialismo "no da respuestas tras el 21 de febrero".
