Tal como estaba previsto, desde las 0 horas de hoy comenzó a regir el nuevo DNU con restricciones más estrictas por, al menos, nueve días a fin de morigerar el aumento casi exponencial de casos de covid-19 en todo el país.
Respecto de los lineamientos generales de la nueva cuarentena estricta, que se mantendrá hasta el domingo 30 inclusive e involucra solo tres días hábiles, se restringe la circulación en todas las zonas del país que se encuadren en “alto riesgo” o en “alarma epidemiológica”. En este caso, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) es la que se lleva todas las miradas, teniendo en cuenta el incremento de los contagios de coronavirus en esta zona registrados en los últimos días.
Según lo dispuesto, quedan suspendidas todas las actividades sociales, económicas, educativas, religiosas y deportivas en forma presencial.
Respecto de las actividades comerciales, estarán habilitados los comercios esenciales, los negocios con envío a domicilio y para llevar.
En cuanto a la circulación de las personas, la nueva normativa establece que solo podrán circular en las cercanías de su domicilio, entre las 6 de la mañana y las 18, o por razones especialmente autorizadas.
Las personas que cumplen tareas de servicio doméstico no podrán trabajar durante los nueve días de duración del aislamiento estricto. Terminados estos nueve días de cierre total, desde el 31 de mayo hasta el 11 de junio inclusive se retomarán las actividades en el marco de las medidas vigentes hasta ayer. En ese lapso, se dispondrá que el fin de semana correspondiente al 5 y 6 de junio se vuelvan a restringir las actividades (tal como ocurrió en estos dos días) en las zonas más críticas.
En la Ciudad. En línea con las disposiciones establecidas en el nuevo DNU presidencial, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires también estableció nuevas medidas de restricciones, que estarán vigentes hasta el 30 de mayo inclusive.
De acuerdo a lo que dispuso Horacio Rodríguez Larreta estarán prohibidos los encuentros sociales, tanto en espacios abiertos como en espacios cerrados y en todos los ámbitos. Los comercios esenciales seguirán abiertos con los protocolos vigentes, mientras que los comercios no esenciales pueden trabajar, pero de la puerta hacia afuera con pedidos previos. En tanto que los locales gastronómicos podrán hacerlo en la modalidad de delivery o retiro en el local, y de la puerta para afuera también con pedidos previos.
Tal como ocurrió en la primera fase de la cuarentena el año pasado, los clubes de barrio no estarán abiertos y no estarán habilitadas las ceremonias religiosas. En las plazas y parques, en tanto, los patios de juegos van a permanecer cerrados y solo van a poder practicarse deportes individuales. Allí tampoco están permitidos los encuentros sociales.
Los consorcios deberán cerrar los espacios comunes de los edificios para evitar las reuniones sociales, que no están permitidas en el ámbito privado. Además, en coordinación con 40 mil consorcios de la Ciudad, se reforzarán las medidas de cuidado en todos los edificios porteños.
Más de 5 mil personas del equipo de la Ciudad van a estar recorriendo cada edificio para dejar folletería informativa donde va a decir claramente que no se pueden usar los espacios comunes, como parrillas o gimnasios.
En este sentido, la línea 911 está abierta para que se pueda denunciar cualquier irregularidad.
Respecto de la movilidad, el transporte público continuará siendo de uso exclusivo para los trabajadores esenciales y solo se permite la circulación para actividades de cercanía. En los accesos y egresos de la Ciudad habrá controles de los permisos. A tal efecto, quedarán cerrados 71 de los 127 que existen en la Capital Federal.
Uno de los puntos álgidos de discusión entre la Ciudad y la Nación fue el relacionado con las clases presenciales o virtuales. En este caso, el Gobierno de la Ciudad tomó la decisión de correr el calendario escolar. Los miércoles, jueves y viernes de la semana que viene, los alumnos porteños no van a tener clases. Esos tres días van a ser recuperados de manera presencial del 20 al 22 de diciembre.
A partir del lunes 31 de mayo, el Decreto de Necesidad y Urgencia plantea la vuelta a la situación actual. La Ciudad reafirma su compromiso: lo primero que se van a abrir son las escuelas.