Con el objetivo de darle centralidad al debate por la boleta única, la mayoría de los bloques de la oposición en la Cámara de Diputados presentó un nuevo pedido de sesión especial para este jueves 5 de mayo en el que amplía el temario con los temas que el oficialismo busca tratar en otra sesión convocada para una hora antes.
En un juego de tira y afloje, la propuesta que ahora debería avalar el presidente de la Cámara, Sergio Massa, es una salida dialogada para mostrar algún grado de consenso entre oficialistas y opositores. Caso contrario, deberán medir fuerzas para ver quien logra juntar el quórum en las sesiones que ya están convocadas.
La decisión fue tomada en un encuentro de referentes de los bloques de Juntos por el Cambio, del interbloque Federal (peronistas y socialistas), de La Libertad Avanza (de José Luis Espert) y los rionegrinos. El único que no firmó fue Cristian Ritondo, del PRO, aunque se quedó para la foto.
Según explicaron, quiso evaluar los pasos a seguir primero con su bloque, aunque fuentes de la oposición aseguran que hubo pases de factura porque el macrismo firmó el martes un dictamen con el Frente de Todos de un tema que después fue incluido en el temario de la sesión especial del oficialismo. Se trata del proyecto para prorrogar un artículo de la ley de incentivo a la construcción, una iniciativa que elaboraron en conjunto Massa y Ritondo el año pasado. Radicales y lilitos habían planteado a sus pares del PRO dilatar una semana la firma del dictamen para poder negociar otros temas en las comisiones, sin embargo finalmente salió con apoyo kirchnerista y macrista.
Es uno de los tres temas que el Frente de Todos planea tratar en la sesión convocada para las 11. También incluyeron una declaración de interés público la respuesta al HIV y otras enfermedades, y la legalización de la producción de cannabis medicinal. Para la oposición, esa convocatoria, realizada justo antes de la opositora, es una "maniobra tramposa". “Es una utilización inmoral del reglamento, no pudieron bajar la sesión para boleta única y embarran la cancha con un juego que no es inocente y cruzan un límite manoseando a las personas con VIH y organizaciones que vienen luchando”, dijo el presidente de la CC, Maximiliano Ferraro.
Tramposos. La maniobra del Frente de Todos es una utilización inmoral del reglamento, no pudieron bajar la sesión para boleta única y embarran la cancha con un juego que no es inocente y cruzan un límite manoseando a las personas con VIH y organizaciones que vienen luchando.
— maxi ferraro 🎗️ (@maxiferraro) May 4, 2022
De todas formas, de prosperar la sesión convocada por el oficialismo, desde las bancadas opositoras pondrán el tema de la boleta única en consideración, para exponer al kirchnerismo al rechazo y plantear el repudio a la maniobra realizada por Massa. Ahora se abrió una ventana para unificar todos los temas en una sola sesión.
Los tres escenarios en Diputados
En caso de que Massa no acepte la convocatoria opositora, se plantean tres escenarios sobre lo que podría pasar el jueves en la Cámara baja. Primero, el oficialismo intentar conseguir el quórum. El poroteo le estaría dando 128, quedando a tan solo uno de lograrlo. Conseguiría el apoyo de la izquierda, el interbloque de los rionegrinos (que también apoyan boleta única) y los misioneros, un neuquino y un santacruceño. Si llegan a 129 se pronostica una sesión de ánimos caldeados, con reclamos de la oposición durante las primeras horas del debate. Y la oposición buscará poner en consideración el tema boleta única, que terminará con un emplazamiento a la comisión de asuntos constitucionales para que en un lapso determinado trate el tema.
De no llegar al quórum, en tanto, se abre el segundo escenario. A las 12 está la convocatoria opositora, que llegaría con lo justo al quórum con 130 diputados. Serían 115 de JxC (falta el puntano Claudio Poggi, que está de licencia), 8 del interbloque Federal, los dos de Espert, los 2 rionegrinos, el riojano Felipe Álvarez y los dos del bloque de Javier Milei. Miran con atención qué podrían hacer el santacruceño Vidal y el neuquino Figueroa.
Ya con quórum, la dinámica opositora sería la misma: pedir el tratamiento de los proyectos de boleta única, para lo cual necesita dos tercios de los votos. Como no los tendrá, expondría al oficialismo en su rechazo al cambio de sistema pero lograría emplazar a la comisión para abrir el debate y llevarlo al recinto unas semanas después. Todo es cuestión de tener el número. Y en una Cámara baja en la que a nadie le sobra nada, la oposición buscará anotarse un poroto.
CP