El tratamiento de la ley de alquileres ya es un dolor de cabeza para varios funcionarios y empezó a complicarse. Los planes para reformar, en un mes, la ley 27.551, surgieron a fines de marzo cuando el interbloque de Juntos por el Cambio presentó un pedido de sesión especial para derogarla el 5 de abril.
Aunque no tenían los votos necesarios para llevarla adelante, pactaron con el oficialismo la constitución de la Comisión de Legislación General para avanzar en un trámite de treinta días con el objetivo de analizar todas las propuestas de reforma de la ley de alquileres.
Se reunieron 30 iniciativas de todos los sectores y un temario de expositores que, hasta la semana pasada, llegó a los 132 invitados en representación de inquilinos, inmobiliarias, corredores, propietarios y organismos de defensa del consumidor, entre otros.
En los papeles, los negociadores de ambas fuerzas políticas pretendían llegar a un dictamen unificado que propusiera una reforma antes de este martes. La realidad mostró otra foto: que la situación es más compleja de lo esperado y que un paso en falso podría dejar a los integrantes de la Comisión de Legislación General muy expuestos ante los inquilinos.
Ellos rechazan cambios estructurales de la ley mientras que los sectores inmobiliarios que tienen dos objetivos estratégicos: el máximo, la derogación total y, el mínimo, la reducción de la duración de los contratos, de tres a dos años. Además plantean, el achicamiento del tiempo de indexación de un año a seis meses, o menos.
Ley de alquileres: cuáles son los principales proyectos que se debatirán en Diputados
En Juntos por el Cambio y el Frente de Todos no hay posiciones comunes. En la coalición opositora no se ponen de acuerdo sobre cómo canalizar el reclamo inmobiliario, sin entrar en guerra con los inquilinos, y en la coalición oficialista cuentan con, al menos, tres proyectos que buscan mantener parte de la ley vigente y morigerar algunos aspectos.
Se esperaba que el trabajo de comisiones continúase este miércoles, pero será el próximo 11 de mayo. Juntos por el Cambio ya anticipó que es su último plazo antes de convocar otra sesión para derogar la ley y el oficialismo parece ganar tiempo para ordenar sus posiciones, hasta ahora sin una línea común.
AVS PAR
