La Cámara de Diputados alcanzó uno de los pocos consensos entre la mayoría de los bloques y avanza en modificar la ley de Alquileres. La idea es que en el debate de la comisión de Legislación General surja un texto en consenso que reciba el apoyo de la mayoría de los espacios.
Sin embargo, las distintas iniciativas que se presentaron van desde derogar la norma actual hasta crear un impuesto a la renta ociosa. Desde que se promulgó la ley, en junio de 2020, se presentaron una veintena de iniciativas.
El Frente de Todos aún no tiene una postura unificada y los distintos miembros presentaron diversas iniciativas. La que más apoyo, en principio obtuvo, fue la del sanjuanino José Luis Gioja. El ex gobernador propone que el Estado intervenga en la compraventa de inmuebles para intervenir en la oferta y poder manejar de algún modo los precios.
Por otro lado, apunta a que el precio inicial del alquiler para la vivienda tenga un tope del 20% adicional al que corresponde con el ajuste anual y un 10% en el caso de la renovación de los contratos. A esto se suman nuevos beneficios para los monotributistas.
"Pretendemos fortalecer y transparentar el mercado inmobiliario y sentar las bases para que, desde el Estado Nacional y los estados provinciales se delinean políticas públicas que faciliten el acceso a la vivienda de alquiler", argumentó.
En Juntos por el Cambio tampoco hay una propuesta unificada hacia dónde ir con este tema. La intención del interbloque era derogar la ley en una sesión especial que tenían prevista para el cinco de abril. Y a partir de ahí, trabajar para una nueva.
El titular del bloque PRO, Cristian Ritondo, presentó su propia iniciativa. El proyecto del bonaerense indica una modificación del Código Civil y Comercial para establecer que “el contrato de locación de inmueble, con destino habitacional, si carece de plazo expreso y determinado mayor, se considera celebrado por el plazo mínimo legal de dos años”. “Dicho plazo mínimo será de tres años para los restantes destinos”, ordena el artículo de la ley.
“La ley de alquileres debe ser modificada urgente. Algunos de sus artículos terminaron afectando los propios derechos que buscaron defender”, argumentó el jefe del bloque PRO.
Frente al pedido de Juntos por el Cambio de derogar directamente la ley, Sergio Massa salió a la cancha a jugar como mediador. Lo hizo con el mismo argumento de que “la Ley de Alquileres fracasó”. El 25 de marzo propuso en Salta “suspender la ley actual y trabajar durante 90 días para tener una nueva ley”.
A la semana siguiente, el tigrense se reunió con los principales jefes del bloque de Juntos por el Cambio y llegaron a un acuerdo político. Resolvieron levantar la sesión para derogar la ley a cambio de que se conformara la comisión de Legislación General y comenzará un debate por 30 días para que se reemplace la ley actual de alquileres.
Eso sucedió el martes pasado. Cecilia Moreau quedó nuevamente a cargo de la presidencia de la comisión que empezará el debate con especialistas la semana próxima. El 27 de abril tienen previsto firmar el dictamen y llevar a principio de mayo al recinto.
Uno de los proyectos que se considerará a la hora de debatir es el que presentó la oficialista Gisela Marziotta. La diputada apunta a construir una Cámara que el Estado controle la implementación de la ley. Ella, a diferencia de Juntos por el Cambio, considera que “la ley actual fracasó porque no se controló lo suficiente”. Además, buscará que se penalice la dolarización de las transacciones, tanto de compraventas como de alquileres.
Una ley que no regula
Al momento el único proyecto que propone desregularizar todo es el que presentó el diputado del bloque Juntos Somos Río Negro Agustín Domingo. Con esto busca "revertir el impacto negativo que generaron algunas disposiciones de la actual ley de alquileres".
En el articulado ordena librar a la voluntad de las partes la elección de un posible ajuste sobre el precio, esto es índice de salarios, inflación, otro o ninguno" e indica que “la garantía que se estima necesaria en cada caso se pueda acordar libremente entre las partes".
"Lo único que lograron los cambios que introdujo la actual ley en estos puntos fue reducir la cantidad de personas que se vuelcan a la inversión en viviendas y así aumentó el precio de los alquileres”, opinó el rionegrino.
La ley se creó sancionó en 2020
La Ley de Alquileres fue una iniciativa que impulsó el diputado mandato cumplido Daniel Lipovetzky (PRO) en 2019. El Senado la aprobó al año siguiente con 41 votos afirmativos y cero negativos. En aquella ocasión, las diferencias políticas entre oficialismo y oposición hicieron que el interbloque de Juntos por el Cambio se levantar ay dejará sus bancas.
En su momento, la miembro informante del Frente de Todos, Ana Almirón, explicó que “el 17% de las familias argentinas accedan a la vivienda a través del alquiler” y “casi el 41% del ingreso familiar” va directo al alquiler “Esta ley es una respuesta que están esperando más de 9 millones de argentinos. Otorga certeza, agilidad y un balance de poder para todas las partes involucradas”, defendió.
Luego de las críticas, el autor de la ley defendió su iniciativa defendió su creación: “No coincido en que toda la norma es mala”, igualmente reconoció la falla en “el método de actualización, que en el proyecto que yo había presentado era semestral y en el debate se consensuó que sea anual”.