De regreso de su gira por África, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió a retomar su desarrollo teórico del efecto jazz, como bautizó a la actual crisis financiera internacional y manifestó que las naciones latinoamericanas deben "amortiguar lo más posible estas crisis para no sufrir por errores que vienen de otras latitudes", en referencia a las grandes potencias, a las que la presidenta apunta en cada discurso en el que aborda la cuestión económica.
La presidenta señaló que las naciones de Latinoamérica "no son las que han causado esta debacle internacional que parece no tener fin ni piso" y que "somos los países (de esta región) que tenemos que pagar las consecuencias de medidas que no causamos". En ese sentido, la mandataria argentina llamó a "aunar esfuerzos, recursos e inteligencia" con México para "amortiguar lo más posible los efectos de la crisis que tiene lugar por culpa de los errores que se cometen en otras latitudes".
Posteriormente, al clausurar un seminario de empresarios de los dos países, la primer mandataria destacó que frente a la crisis internacional es necesaria "la existencia de medidas contracícilicas y la presencia del rol del Estado, que va a tener que ser el gran actor en la etapa que viene". En este marco, y luego de advertir que “no creemos en las economías de la subordinación”, ratificó la “necesidad de que cada país diseñe su modelo", al margen de lo aconsejado por los organismos financieros mundiales, pero aclaró que “eso no significa aislarse del mundo”. Calderón, por su parte, había hecho un prolijo repaso de las medidas que adoptará México para superar la situación y destacó especialmente a la inversión, pero también el comercio, la integración económica y el “gasto público como un instrumento a corto plazo”, entre otras iniciativas.
Ambos presidentes coincidieron en la necesidad de “reformular a los organismos internacionales de crédito”. Cristina Fernández agradeció a México "el trato que tuvo para miles y miles de argentinos que encontraron " asilo durante la última dictadura militar y recordó entre ellos, al ex presidente Héctor J. Cámpora.
Por su parte, el mexicano afirmó que la Argentina "es un socio comercial privilegiado" para su país y abogó porque esta gira sirva para "fortalecer" el intercambio comercial y las inversiones entre ambas naciones.
Aunque la presencia de Calderón tenía como objetivo ratificar la asociación estratégica entre ambos países, la agenda viró hacia los casos policiales que dejaron al descubierto la venta de efedrina desde la Argentina a carteles mexicanos que la usan como precursor para la elaboración de drogas sintéticas.
Entre los acuerdos bilaterales firmados, ambos jefes de Estado se comprometieron a fortalecer la lucha contra el narcotráfico y a avanzar en la negociación de un tratado de extradición en materia de delitos penales.
"Creo que esta visita de Estado va a profundizar aún más las excelentes relaciones comerciales que vienen acrecentándose en forma inédita entre ambos países", dijo la Presidenta, durante el almuerzo en el Palacio San Martín ofrecido en honor de su huésped.
El mandatario mexicano por su parte afirmó que la Argentina "es un socio comercial privilegiado" para su país y abogó porque esta visita sirva para "fortalecer" el intercambio comercial y las inversiones entre ambas naciones.
Calderón, quien visita la Argentina acompañado por una nutrida delegación de empresarios entre los que se encuentra el poderoso Carlos Slim, remarcó que el año pasado el comercio bilateral tuvo una cifra de 3.000 millones de dólares, que calificó "sin precedentes" en la historia de ambas naciones.
"Aprovechemos al máximo las ventajas de la asociación estratégica para fortalecer el comercio bilateral y las inversiones", subrayó, luego de remarcar la importancia de la puesta en marcha del consejo de la asociación estratégica que se suscribió en la jornada.
En ese sentido, la mandataria argentina llamó a "aunar esfuerzos, recursos e inteligencia" con México para "amortiguar lo más posible los efectos de la crisis que tiene lugar por culpa de los errores que se cometen en otras latitudes".
Fernández de Kirchner otra vez echó la culpa a las naciones más industrializadas por la crisis económica que sacude al mundo y recordó que fueron "las economías emergentes las que han sostenido el crecimiento internacional, y vemos con mucha preocupación y ocupación cómo amortiguar los efectos de la crisis".
Ambos presidentes también hicieron referencia al mural del muralista mexicano David Sequeiros que estuvo virtualmente abandonado durante años por una disputa legal en varios containers en la Aduana, y que ahora está siendo restaurado en un galpón especialmente construido en la Plaza Colón, detrás de la sede gubernamental.
Cristina Fernández recibió a su colega en la Casa de Gobierno, luego lo agasajó con un almuerzo en el Palacio San Martin y por la noche clausuraron el Seminario de Oportunidades de comercio e inversiones entre la Argentina y México.
Fuente: DYN