La Presidenta Cristina Fernández de Kirchner participó esta tarde del acto central por el bicentenario de la fundación de la capital de Entre Ríos, y firmó convenios y entrega certificados de programas nacionales.
En el acto, que contó con la presencia del gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, y el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, entre otras autoridades nacionales y provinciales, Cristina se refirió a una variedad de temas y anécdotas sin profundizar mucho en ninguna.
La Presidenta inició su discurso recordando el inicio de mandato de Néstor Kirchner en la presidencia en 2003, cuando acudió a resolver la crisis de educación en Entre Ríos junto a Daniel Filmus (quien esta semana inició su campaña porteña para renovar su banca en el Senado).
El comienzo de campaña. El discurso ácido con la Justicia que venía ostentando Cristina quedó relegado a un segundo plano en su primera aparición luego del cierre de las listas. Y a la hora de votar, "que cada uno de los argentinos se acuerde cómo estábamos antes de ese 2003", expresó la mandataria.
De esa manera, la jefa de Estado se puso al hombro la campaña del Frente para la Victoria y aprovechó para criticar a las distintas alianzas con las que compite sus listas, principalmente a la que lidera Sergio Massa: "Ser legislador no es integrar un rejunte de gente para ganar una elección". Y explicó: "Las elecciones son un día pero se gobierna todo el año".
Con un tono más conciliador que en sus últimas apariciones, la mandataria se pronunció a favor de la "unidad nacional" que "no significa estar de acuerdo en todo, con todos, lo importante es estar de acuerdo en las cosas fundamentales, en la inclusión social, en la soberanía, saber que esta la Casa Rosada decide en nombre del pueblo".
El estadio con su nombre. "Hay gente que se enoja cuando le quieren poner el nombre de alguien. Yo ni enterada estaba que le querían poner mi nombre a un estadio y se armó un lío bárbaro", contó en otro momento Cristina, en relación al proyecto en la cancha de Crucero del Norte, y agregó: "La mejor memoria es la que está en el corazón del pueblo".
Las protestas en Brasil. Por otra parte, hizo una mención a la grave situación social e institucional que atraviesa Brasil y advirtió que mientras "hasta hace unos días nos referíamos a lo que sucedía en tierras lejanas, ahora vemos las cosas que pasan un poco más cerca, con nuestros amigos".
Por eso, pidió "no ejercer la responsabilidad institucional a la bartola" y no hacerlo "con la partitura de las corporaciones internacionales y de los medios hegemónicos, sino con la batuta del pueblo".
Luego, hizo alusión al uruguayo José Gervasio de Artigas que "quería ser argentino y no lo dejamos... ¡carajo!", porque "nos dividieron y nos separaron", afirmó e inmediatamente se disculpó por la expresión utilizada.
La virgen. La Presidenta, por otro lado mencionó la anécdota de la elección del patrono de Paraná en 1825, en donde, según dijo, la gente votó entre la Virgen y San Miguel, y ganó la primera. "¡Vamos la virgen, todavía! ¡Vamos la mujeres!", festejó la Presidenta.
El show. La participación de Cristina en Entre Ríos comenzó cerca de las 19 y contó con 55 mil espectadores que escucharon a la presidenta; pero el festejo por el bicentenario contó musicales en vivo desde las 15. Una caravana náutica sobre el río Paraná también contribuyó para dar un marco diferente a la fiesta.