La primera dama y candidata presidencial Cristina Fernández de Kirchner afirmó que el país tiene que “volver a estar en el mundo”, después de que la política exterior permaneciera en un segundo plano durante el gobierno de su marido, el presidente Néstor Kirchner.
"La Argentina tiene que volver a estar en el mundo. Cuando había que resolver el hambre de muchos argentinos, la política exterior pasó a un segundo plano y debimos vivir un poco encerrados. Eso ya pasó", dijo la candidata, en una entrevista con el periodista Joaquín Morales Solá, publicada hoy en el diario La Nación.
La senadora indicó que no concibe "la política exterior sólo como un entramado político y social" y propuso "aprender de los grandes países: sus embajadores son también los embajadores de sus economías, de sus empresas y de sus intereses comerciales, sin descuidar, desde ya, las grandes cuestiones políticas".
Hacia un país capitalista. La candidata del Frente para la Victoria señaló que su propuesta de gobierno se basa en acordar una política de Estado, tanto en lo económico como en lo social, con empresarios y sindicatos. "Yo propongo un acuerdo que no se encierre sólo en precios y salarios, sino en una política de Estado sobre la economía que queremos", dijo.
El objetivo es, agregó, avanzar hacia "un país capitalista con acento en las exportaciones en la "marca Argentina" instalada en el mundo”. Un país “con el necesario equilibrio social también”, señaló la candidata..
"Sobre eso deberíamos buscar un acuerdo entre empresarios, sindicatos y el Estado. Nunca eliminaremos el conflicto definitivamente, pero habrá una contención, al menos", subrayó.
El conflicto del campo. Fernández llamó a terminar con los conflictos entre el agro y la industria. "Hay que abandonar el terreno de la discordia entre el campo y la industria, o entre el mercado interno y el externo. Todo es importante", destacó.
"¿Por qué vamos a despreciar nuestro campo, el más competitivo del mundo con progresos que asombran? ¿Por qué vamos a descuidar la industria donde hemos hecho progresos importantes y que sirve para dar mano de obra intensiva a muchos argentinos?", se preguntó.
Las carencias de la oposición. “Creo que la oposición carece ahora de un serio discurso alternativo más que de condiciones", señaló la legisladora. "El Estado es el parlamento también y es ese el ámbito del debate con la oposición. Las alternativas deben surgir del parlamento".
Para la candidata, los partidos políticos están en una etapa de transformación. "Tras épocas de crecimiento económico siempre surge un nuevo sistema de partidos", dijo. "Ninguno de los partidos sobrevivirá ahora tal como los hemos conocido antes de la crisis. El peronismo tampoco", explicó.
El socialismo de Chávez. La legisladora se refirió en particular a Venezuela y a México. "Dije en Europa que ellos conviven con Putin, pero a éste se lo acusa de haber matado a una periodista y a un disidente. Chávez no ha hecho eso", declaró.
"Y dije que Chávez era tan necesario para la matriz energética de América latina como Putin los es para la de Europa. Ha sido elegido democráticamente".
Respecto al socialismo que promueve el mandatario venezolano,la primera dama señaló: "Es un socialismo que compra empresas a valor de mercado, paga puntualmente sus deudas y respeta todos los compromisos energéticos con los Estados Unidos".
"La palabra socialismo es un poco extraña en esas condiciones, como es extraño el doble discurso de muchos empresarios: critican a Chávez mientras hacen buenos negocios con él. En fin, nada es tan terminante como parece", añadió.
Tal como lo hiciera el Presidente esta semana, la candidata se manifestó contraria al muro que quiere levantar Estados Unidos en su frontera con México. "Es un muro simbólico entre los Estados Unidos y América latina y eso no está bien en un mundo globalizado", subrayó.