La Presidenta encabezó el primer acto después de la muerte de su esposo en la planta de Córdoba de la empresa Renault. Habló durante 15 minutos y elogió a su ex marido. Al final del discurso casi se quebró en un llanto y expresó: "Hoy estoy menos triste porque sé que está acá con nosotros, caminando entre ustedes. Lo siento acá".
Cristina Fernández también defendió con énfasis sus políticas oficiales al asegurar que " parecía imposible reindustrializar" el país y recordó a su fallecido esposo Néstor Kirchner al señalar que "creía profundamente en su pueblo".
La Presidenta, que hoy retomó la agenda con normalidad expresó más elogios para Kirchner: "En 2003 se instaló un proyecto de país absolutamente diferente. Lo hizo un hombre que creía en su pueblo (..) Que creía que era posible un desarrollo propio, con autonomía en un mundo globalizado".
Asimismo, CFK señaló que "es mentira que la economía esté por sobre la política. En 2003 decidimos a qué intereses queremos y tenemos que representar". También tuvo palabras para las "corporaciones" y los partidos de la oposición, postura que no se modificó en lo más mínimo tras el trance vivido.
"Fuimos muchas veces criticados, que nos decían el modelo es el que estaba afuera, en los países del norte, en Wall Street. Pero cuando se derrumbó, el modelo de acá lo soportó. Nada es gratuito ni nada es mágico", apuntó.
Cristina viajó acompañada por colaboradores y en otro vuelo habían partido hacia Córdoba los ministros Amado Boudou y Carlos Tomada, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, y el ex gobernador cordobés José Manuel de la Sota. En el acto estuvo acompañada por el presidente de Renault Argentina, Dominique Maciet, y el gobernador Juan Schiaretti, quienes antes brindaron un discurso.
