Hay dos distritos bonaerenses en los que la calma se impuso sobre la guerra despiadada que se vive en la interna de Juntos por el Cambio: General Pueyrredón y Vicente López. La disputa entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich se trasladó a todos los municipios provinciales y los referentes de cada lugar repiten historias de triaciones y competencias desleales. Sin embargo, los precandidatos a intendente Guillermo Montenegro y Soledad Martínez consiguieron ordenar la política local y negociar la tan codiciada "Lista V".
General Pueyrredón y en Vicente López serán los únicos municipios bonaerenses donde los electores de Juntos por el Cambio podrán encontrar en el cuarto oscuro dos listas con su candidato a intendente: en una acompañando el armado de Bullrich, con la opción de Néstor Grindetti para la Gobernación, y en la otra acompañando el armado de Rodríguez Larreta, con Diego Santilli.
La "Lista V" solo fue concedida para General Pueyrredón y Vicente López. Se trata de la presentación de candidatos únicos a nivel local pero con dos posibles cabezas, como si fuera en forma, justamente, de "V". A Martínez y Montenegro la Justicia Electoral les otorgó la lista 132 a nivel municipal, que podrá verse acompañando a las 132 A y 132 B, que corresponde a las dos líneas internas que se disputan en su coalición a nivel provincial y nacional.
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A nivel municipal es una gran oportunidad para traccionar votos de los referentes nacionales sin tener que inclinarse por uno o el otro.
En Ciudad de Buenos Aires la foto que se publicó ayer en la que posan Bullrich y Rodríguez Larreta junto a Jorge Macri y Mauricio Macri fue el respaldo público de los dos precandidatos al porteño. Sin embargo, en Vicente López y General Pueyrredón, dicen los referentes locales, no hizo falta llevar al límite la interna -como sí ocurrió en CABA- para conseguir un acuerdo.
Equilibistas, Montenegro y Martínez serán los candidatos únicos de sus territorios. El marplatense Montenegro, que en principio parecía uno de los aliados de Rodríguez Larreta, consiguió el trato privilegiado a fuerza de tener "la casa en orden", como dicen sus allegados, y de saber reconocer el crecimiento de Bullrich para saber que no era momento de jugársela. Martínez, la sucesora de Jorge Macri, tuvo que pelearla un poco más y se impuso a pesar de los intentos que hubo de instalar a otro candidato.
Guillermo Montenegro y Soledad Martínez: los candidatos con la Lista V
"Guillermo tiene relación con los dos. Lo de Larreta es sabido, pero también trabajó mucho con Bullrich. Además, hubo ofrecimientos para postularse con Santilli en provincia y Patricia también le ofreció un puesto. Pero por suerte pudo esquivar la guerra", dicen los colaboradores de Montenegro.
Buena parte la coalición a nivel provincial suponía que Montenegro iba a jugar con Rodríguez Larreta. "Tienen una excelente relación. Incluso cuando hubo alguna tensión, como cuando fue el inicio de clases en CABA adelantado y Guillermo sintió que eso era perjudicial, se habló y se resolvió", agregan. Sin embargo, no solo con buenas relaciones, se construye en política. El marplatense pudo reconocer que si no conseguía acordar era probable que le instalaran un precandidato que le disputara su territorio.
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De hecho, eso es lo que casi le sucede a Martínez. "La Lista V está buena, pero es difícil andar haciendo equilibrio en una delgada línea entre dos referentes que se están matando. Soledad lo logró siendo muy imparcial y hasta se impuso cuando Gustavo Posse quiso instalar su candidato", cuentan los allegados a la intendenta de Vicente López.
El malestar con Posse todavía se siente. El hombre fuerte de San Isidro que se presenta como precandidato a vicegobernador de la mano de Santilli hizo todo lo posible para que su alfil Nicolás Marchiolo compitiera en una interna con Martínez. "Se ve que está en un año difícil y quiere romper todo. En muchos lugares lo consiguió y hay municipios donde la interna es salvaje. Acá Soledad pudo salir airosa", agregan las mismas fuentes.
Montenegro y Martínez quedaron muy bien posicionados, ya que la Lista V permite traccionar votos de todos los simpatizantes de Juntos por el Cambio sin el riesgo de tener que tomar una posición. De hecho, ninguno de los dos planea decir en público a quién votará en las internas presidenciales del 13 de agosto.
El intendente marplatense asumió en diciembre del 2019 y, hasta último momento, no se supo si iría por un segundo mandato. Una vez que lo definió, supo que lo mejor que le podía pasar para retener el gobierno local era no embarrarse con una pelea ajena. La intendenta de Vicente López sigue los pasos de su líder político, Jorge Macri, quien tampoco hizo público su favoritismo.
Martínez asumió formalmente en el municipio cuando Macri renunció para dedicarse a la campaña porteña. Sin embargo, ya venía ejerciendo el cargo desde diciembre del 2021, cuando el primo del expresidente se tomó licencia para integrar el Gabinete de Rodríguez Larreta en la Ciudad. "Ella siempre hace el chiste y dice: 'A mí no me votó nadie'. Ahora su desafío es que la voten", cuentan quienes la conocen.
GL/fl
