Este martes 19 de febrero la senadora Cristina Fernández de Kirchner cumple 66 años. La celebración probablemente estará marcada por los diversos frentes que tiene abiertos: su posible postulación a las elecciones presidenciales de este año, el comienzo del juicio oral y público en su contra por el supuesto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz, el avance de otras causas de corrupción en las que está procesada y la preocupación por su la situación judicial de sus hijos, en especial de Florencia.
El año pasado, la expresidenta ya tuvo una celebración poco agradable. Ese día, en el programa Libre de Luis Majul emitido por Radio Berlín se revelaron más escuchas telefónicas entre ella y el extitular de la AFI, Oscar Parrilli. Una seguidilla de audios que alimentaron memes y críticas.
¿Como se encuentra la senadora a 365 días de esa fecha? Una de las grandes incógnitas de este nuevo año es si finalmente Cristina se va a presentar en las próximas elecciones presidenciales. Un gran sector de la oposición reclama la unidad del peronismo y la postula como posible candidata.
Han sido varios los referentes políticos que apoyaron su eventual candidatura, como el exjefe de Gabinete Alberto Fernández, el jefe del bloque de diputados, Agustín Rossi, el titular del PJ nacional, José Luis Gioja y el grupo de dirigentes que se alejó del massismo en octubre, como Felipe Solá, Facundo Moyano y Daniel Arroyo, por nombrar algunos. También desde el gremialismo la respaldan, como el camionero Hugo Moyano.
Sin embargo, el espacio peronista no kirchnerista "Alternativa Federal", integrado entre otros por Juan Schiaretti, Miguel Ángel Pichetto, Sergio Massa y Juan Manuel Urtubey, sostiene que la mejor opción es romper con el bipolarismo entre Mauricio Macri y Cristina y rechaza unir fuerzas con la expresidenta.
Las encuestas difundidas hasta el momento le son favorables: varios sondeos la muestran con posibilidades de ganar un eventual balotaje si se enfrenta al presidente Mauricio Macri.
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Por otro lado, parte de su atención se concentra en Comodoro Py. El próximo 21 de mayo arranca el primer juicio oral en su contra por el supuesto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz en favor del empresario Lázaro Baéz. En el expediente también está imputado el dueño de Austral Construcciones junto con el ex secretario de obras públicas José López y el exministro de Planificación, Julio De Vido, entre otros exfuncionarios.
En un primer momento la fecha del juicio se había establecido para el 26 de febrero, pero el Tribunal Oral Federal (TOF) 2 decidió postergar el comienzo del proceso a raíz de los problemas de salud de uno de los tres magistrados, Jorge Tassara, quien será operado para colocarle un triple bypass.
Además del juicio, la legisladora de Unidad Ciudadana enfrenta un complejo panorama judicial. Está procesada en la causa conocida como los “cuadernos de las coimas”, en la que se la acusa de ser la jefa de la asociación ilícita que operó en el país entre los años 2003 y 2015 en torno a la obra pública.
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También está procesada en la causa dólar futuro por el delito de administración infiel en perjuicio de la administración pública; en el expediente del Memorándum con Irán, en el cual está dictada la prisión preventiva pero permanece en libertad por los fueros parlamentarios; en la causa Los Sauces, acusada de enriquecimiento ilícito; y en Hotesur en la que es investigada por supuesto lavado de dinero.
A esto se le suma que por todas estas causas pesan sobre la exjefa de Estado varios embargos millonarios.
Pero quizás lo que más preocupa a la expresidenta son sus hijos. En la causa Los Sauces, el juez Julián Ercolini envió a juicio oral a la exmandataria y a Máximo y Florencia Kirchner, pero esta última no cuenta con fueros parlamentarios que la protejan de una eventual condena a prisión.
Máximo necesita presentarse en las próximas elecciones para renovar su banca en Diputados y mantener de ese modo los fueros que se supondrían un escudo para enfrentar las causas judiciales en su contra.
Pero Florencia no cuenta con protección legislativa. La hija menor del matrimonio presidencial nunca mostró interés en el mundo de la política, sino en el de la cultura. Además de Los Sauces, por su vínculo parental también es investigada en el expediente Hotesur.
En el caso de que Ercolini encuentre culpable a Florencia Kirchner de los delitos que se le imputan y la pena sea superior a tres años, la joven se enfrentará a su ingreso a prisión. No obstante, antes debería estar firme la condena, es decir, que sea ratificada por instancias superiores.
Al ser considerada miembro de asociación ilícita se enfrenta a una posible pena que va de entre 3 a 10 años de prisión. A lo que debe considerarse también que está acusada del delito de lavado de activos. Su eventual condena estará sujeta también a si es encontrada responsable de los delitos que se le imputan en concurso real o ideal, lo que podrá variar el monto que se le imponga.
B.D.N./FeL
