“No tenemos duda de que el juicio por difamación es un juicio ganado”, dijo Gregorio Dalbón, abogado de Cristina Fernández de Kirchner. Así se refirió a las eventuales acciones civiles y penales que iniciarán, según adelantó a Perfil, por la filtración de la conversación telefónica entre la expresidenta y el extitular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Oscar Parrilli.
En diálogo telefónico con este portal, el letrado afirmó: “Considerando que, en el juicio de Beatriz Salomón, un juzgado de primera instancia le dio 30 millones de pesos a la actriz por difamación, entiendo que aquellos que están difamando a la expresidenta de la Nación van a tener que, por lo menos, sostener una demanda de más de 150 millones de pesos”.
“No queremos decir que Beatriz Salomón no sea igual ante la ley que Cristina Fernández. Simplemente creemos que la difamación no tiene absolutamente que ver con ninguna causa de las que se la imputa, ni con su función pública, y que es una expresidenta de la Nación”, precisó.
Dalbón adelantó que el eventual juicio, cuya demanda presentarán a fines de febrero, “personalmente, me va a traer jugosos honorarios, y lo que se recaude se donará al Hospital de Niños de La Plata, tal como me lo ordenó Cristina ayer”.
“Vamos a accionar contra absolutamente todas las personas que han mancillado el honor de la expresidenta de la Nación, en relación a su forma de hablar, a la intromisión en su privacidad, y las burlas que recibió”, comentó el abogado a este portal. Además, opinó que el exabrupto de Cristina Fernández era justificable porque “estaba hablando con una persona que trabajó con ella durante muchísimos años como es el Dr. Parrilli”.
“Soy yo, Cristina, pelotudo”. La polémica frase de la expresidenta, en pocas horas se convirtió en memes y en ringtone para celulares. La discusión se conoció primero a partir de una transcripción que publicaron algunos medios, y ayer se difundió el audio completo.
Según Dalbón, “la intervención de un teléfono no puede afectar a terceros por fuera de una causa judicial”. “Si hay una intervención en el teléfono de Oscar Parrilli jamás podría afectar a una persona tercera y ajena a este proceso, como es mi clienta. En este caso, este material es ajeno a la causa de mi clienta y por eso es ilegal”, argumentó a Perfil.
Las escuchas telefónicas datan de junio y julio de 2016, cuando se investigaba a Parrilli por presunto encubrimiento a Esteban Ibar Pérez Corradi, e involucran al exjefe de Operaciones de la SIDE, Antonio Stiuso. A partir de estas filtraciones, el pasado viernes el fiscal Guillermo Marijuán denunció a la ex jefa de Estado por "abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público".
“Vamos a ir con todo, no solamente en la fase civil, sino también vamos en la fase penal, por intromisión a la privacidad, de la que se encargará Carlos Beraldi. Y analizaremos después el rol que cumplió quien dio la escucha”, señaló el abogado. Y concluyó: “Si Marijuán insiste en imputar a Cristina Fernandez de Kirchner con las grabaciones difundidas, va a ser sometido a juicio político por incompetente”.
