Dirigentes radicales denunciaron penalmente al gobernador tucumano José Alperovich por espionaje. La presentación se debe al D2, organismo donde según los denunciantes se desarrollan actividades de infiltración, seguimiento, captación de fotografías de representantes y referentes políticos, gremiales, universitarios y del ámbito cultural.
Puntualizan que todas esas actividades, que incluso han tenido fuerte trascendencia en medios de prensa provinciales y nacionales, "son realizadas en forma ilícita, en franca contraposición con las disposiciones de nuestra Constitución, la Ley de Inteligencia Nacional y la Ley de Protección de Datos Personales".
El legislador José Cano habló con Perfil.com sobre la denuncia y contó que el objetivo es frenar estas acciones del Estado: "No sabemos nada del D2, no hay presupuesto, no pertenece a la policía, es una incógnita".
Contó que estuvieron en los lugares desde donde funciona el centro y "es una cueva donde no hay identificación de nada, no hay patentes. Cuando salen, trabajan como civiles infiltrados en las marchas"
También aportó el nombre de un fotógrafo, que pertenecería a la policía, y que vestido de civil realiza tomas de imágenes de dirigentes opositores. En ese sentido, se solicita el allanamiento del domicilio de esta persona, aportándose una dirección.
Cano también pidió el inmediato allanamiento de la dependencias utilizadas por la D2, secuestrándose todo archivo físico o informático, computadoras, tecnología de intercepción y escuchas telefónicas, equipos de filmación y fotografía, etc.
Negó todo. El gobernador José Alperovich descartó la existencia de operaciones para perseguir políticos opositores. "Es tremendo lo mentirosos que son. Lo desmiento totalmente. Jamás en mi vida he dado una orden de que se persiga a políticos", señaló y consideró que la oposición "como no sabe dar soluciones, intenta ensuciar el nombre, poner palos en la rueda y por eso van a la Justicia".