El primero en aparecer para impedirles el acceso al Lago Escondido fue el referente del PRO y ex candidato a intendente de El Bolsón, Juan Carlos Martínez. Pasó el domingo 1º de mayo: en una audaz movida, militantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular marchó rumbo al lago que el británico Joe Lewis, uno de los hombres más ricos del mundo y amigo de Mauricio Macri, tiene semi-privatizado en Río Negro, incluso en contra de lo ordenado por un fallo judicial de 2009.
Ahí, en la mansión de Lewis, dentro de su predio de 12 mil hectáreas, Macri descansó en Semana Santa. Su amistad con Lewis, sumada al hecho de que usó el helicóptero privado del empresario inglés, le costó críticas y una denuncia (de resultado aún pendiente) ante la Oficina Anticorrupción.
Ese viaje de Macri derivó en explicaciones incómodas de los voceros presidenciales. Sobre todo a la luz de la privatización de facto que concretó Lewis en Lago Escondido, tras haber comprado esas tierras en 1996. A partir de su llegada, la presencia y el secretismo de Lewis generaron rechazo entre vecinos, militantes y algunos políticos de Río Negro.
En 2009, el Tribunal Superior de Justicia provincial falló a favor de un amparo para habilitar el ingreso al lago y generar uno accesible. Sin embargo llegar hasta el lago es una odisea que implica abrir y cruzar las tranqueras de Lewis.
El Día del Trabajador, entonces, la CTEP quiso hacer visible su reclamo y denunciar la situación: cuando unos cien militantes iban rumbo al lago, aparecieron civiles y policías para cortarles el paso. Uno era Martínez, el candidato macrista de El Bolsón en 2015.
“¿Y yo puedo acceder libremente a tu casa?”, repreguntó con ironía el referente del PRO cuando el abogado y miembro de la CTEP Juan Grabois consultó si podían ir hasta el lago.
Dueño de los supermercados El Chaqueño, Martínez se considera amigo personal de Lewis, a quien califica como una “excelente persona y anfitrión”. “No soy encargado de la seguridad, simplemente asesoro y ayudo a los amigos que son positivos para la región”, explicó Martínez a PERFIL.
Apenas se enteró de la movida de la CTEP, Martínez fue con su camioneta hasta el lago junto al vice de la empresa Hidden Lake, Héctor Vera. Esa compañía de Lewis apura un negocio polémico: construir una central hidroeléctrica en el lago para proveer de energía a El Bolsón