El embajador de Israel en la Argentina, Rafael Eldad, consideró como un hecho “inédito” que Irán “en lugar de responder puntualmente a las acusaciones” por el atentado a la AMIA esté “ejecutando amenazas e intimidaciones a los propios fiscales”.
“Esta conducta no es ninguna sorpresa. Sabemos de las expresiones de Irán y de su agresividad, de su violencia de su manera de hablar y actuar”, declaró el diplomático, quien señaló que la de aquel país “es una conducta inaceptable, rechazada y repudiada por toda la sociedad”.
Las consideraciones del embajador de Israel se produjeron poco después que la Cancillería argentina convocara al encargado de negocios iraní, Mohsen Baharvand, para manifestarle su “preocupación” por las intimidaciones a los fiscales a cargo de investigar el ataque a la AMIA, Alberto Nisman y Marcelo Martínez Burgos.
Por su parte, el titular de la mutual judía, Luis Grynwald, aseguró que “los representantes iraníes se quedaron sin argumentos ante las evidencias, ante esta falta de contestación surgieron las amenazas”.
“Teherán busca impugnar la búsqueda” insistió el titular de la AMIA al tiempo que cuestionó “la falta de respuesta de las autoridades iraníes a las pruebas que entrega el gobierno argentino. Es lamentable todo esto”, concluyó.
Por su parte, el abogado de los familiares de las víctimas de la AMIA, Pablo Lanusse, calificó de “lamentable y grave” la intimidación que vivió la delegación argentina en Francia. Además, el letrado sostuvo que es “llamativo y preocupante” que Interpol no adopte las medidas necesarias en relación con el pedido de captura de los sospechados del atentado a la mutual judía.
“Es un hecho que no puede ser aceptado bajo ninguna índole porque pretende condicionar y muestra una actitud hostil hacia la cooperación internacional que debe existir en la lucha contra el terrorismo”, manifestó el abogado con relación al episodio en el que fueron amenazados los fiscales de la causa.
El ex fiscal criticó la actitud de Interpol al recordar que “las capturas fueron pedidas por el juez (Rodolfo) Canicoba Corral en noviembre. Hay nueve personas identificables que están siendo requeridas y hoy ni siquiera están asentandas en la base de datos de Interpol. Es llamativo y preocupante; en 2005 concedió 2205 pedidos de código rojo”, concluyó el abogadi en alusión al pedido de alerta máximo sugerido por los fiscales para capturar a los sospechosos.
Fuente: Télam y DyN