El exsecretario de Seguridad Sergio Berni fue imputado este mediodía luego de que la exlegisladora Graciela Ocaña lo acusara de ocultar información valiosa sobre el paradero de Ibar Pérez Corradi, supuesto instigador del homicidio de Leopoldo Bina, Sebastián Forza y Damián Ferrón.
Ayer, Perfil.com se comunicó con el exsecretario de Seguridad, quien declaró que la denuncia efectuada en su contra -de la que no estaba al tanto- “es absurda”, ya que Pérez Corradi “no se fugó, sino que lo dejó libre la justicia. Yo no tengo nada que ver, lo que pasa es que ya no saben que denunciar”.
La legisladora porteña Graciela Ocaña habría tomado las declaraciones que Berni le brindó a Perfil.com para considerar que pudo haber avalado el ocultamiento de información valiosa para dar con el paradero de Pérez Corradi. En declaraciones a este medio, había señalado que “claramente” el prófugo tuvo “protección del gobierno anterior”, pero que, con el kirchnerismo fuera del poder “perdió el respaldo político que tenía”.
La causa contra Berni quedó radicada en el juzgado Federal n°4, a cargo del juez federal Ariel Lijo, bajo el número 481/2016. Los cargos que se le imputan al ex funcionario kirchnerista son los de abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, delitos para los que el artículo 248 del Código Penal estipula entre un mes y dos años de prisión, con cuatro años de inhabilitación para ejercer la función pública.
También fue denunciado por una tercera infracción, la de encubrimiento, para el cuál, el artículo 277 establece entre seis meses y tres años de prisión.