Convertido por el presidente Néstor Kirchner en el principal vocero del Gobierno, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, es el primero en dar la cara para dialogar sobre cuestiones vinculadas a Balcarce 50. Esta vez, salió a defender la autorización del 20 por ciento promedio de aumento del transporte público al afirmar convencido que “no es un ajuste”.
“Nadie puede ver como un ajuste” el aumento en las tarifas de colectivos, trenes y subterráneos, afirmó Fernández, quien explicó que se trató de “equilibrar” los precios de los boletos metropolitanos con los del interior del país que alcanzan precios superiores en relación a la Ciudad de Buenos Aires.
“La corrección de las tarifas de autotransporte es un tema que dilatamos durante mucho tiempo”, destacó Fernández a radio Belgrano, a lo que agregó que “en verdad hemos corregido ni siquiera en la magnitud de lo que pasa en el interior del país”, donde la tarifa promedio “oscila en 1,30 pesos”, puntualizó el jefe de Gabinete.
Por lo tanto, Fernández consideró que "nadie puede ver semejante cosa como un ajuste", sino que afirmó que "es una corrección que tiende a guardar racionalidad y a equilibrar las cargas entre la Ciudad, el Gran Buenos Aires, y el interior del país".
Ni yanquis ni marxistas. Por otra parte, el jefe de Gabinete señaló que tras la designación del francés Domnique Strauss-Khan al frente del Fondo Monetario Internacional (FMI), la relación con el polémico organismo no debe ser “ni de sumisión, ni de soberbia, sino respetuosa y madura”.
"En esos términos va a ser recibido el titular del Fondo (adoptado con beneplácito por el Gobierno), organismo con el cual hoy no tenemos ningún vínculo porque gracias a Dios nada le debemos, pero que es bienvenida su presencia a compartir el acto de asunción de la presidenta" electa, Cristina Fernández de Kirchner, indicó Fernández.
Nuevo año de emergencia. En relación a la discutida iniciativa que pretende dar facultades al Poder Ejecutivo para reasignar partidas presupuestarias, Alberto Fernández afirmó queNéstor Kirchner “no está enojado para nada” por el revés que sufrió la Ley de Emergencia Económica en el Senado, donde no se reunió el quórum para votarla.
Fernández comentó que el jefe de la bancada de senadores del Frente para la Victoria, Miguel "Pichetto nos había anunciado la dificultad que había para tratar el tema sobre tablas", mientras que explicó que "para tratar el tema sobre tablas hace falta el voto de las dos terceras partes del cuerpo" y "el bloque radical no quería hacerlo, con lo cual había alguna dificultad".
Tabaré puede quedarse tranquilo. Ante los rumores que indicaban que el presidente uruguayo Tabaré Vázquez podría ser escrachado por asambleístas de Gualeguyachú por la instalación de la pastera Botnia en Fray Bentos, Fernández señaló que no vislumbra “ningún riesgo” en la visita del mandatario charrúa a la Argentina para la ceremonia de asunción de la primera dama.
De esta manera, el jefe de Gabinete le contestó al canciller uruguayo, Reinaldo Gargano, quien le había pedido “garantías” al gobierno argentino para que Tabaré participe en el acto del lunes que viene en el Congreso y en Casa Rosada.
"Todos en Argentina somos responsables de la seguridad de todos los que vienen, y obviamente trataremos a todos los visitantes con el afecto y con el cuidado debido", dijo Fernández.
Años trascendentes. Finalmente, el jefe de Gabinete -quien fue confirmado para su cargo en el próximo mandato presidencial- dialogó acerca de la gestión del presidente Néstor Kirchner, de la cual dijo tuvo un resultado “muy positivo”.
"Uno tiene la sensación del deber cumplido, ha sido un gran orgullo ser el Jefe de Gabinete del presidente Néstor Kirchner. Tengo la impresión que no fueron años intrascendentes, sino que fueron años donde la Argentina cambió absolutamente", señaló el jefe de ministros en declaraciones a radio Mitre, quien dialogó de todo a tres días del final del mandato presidencial.
Fuente: DyN
