La Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió este sábado que "no se descarta" que la central sindical convoque a "un paro general" para antes de fin de año. Desde el Gobierno, calificaron la iniciativa como "inoportuna" y "ridícula".
"No se descarta un paro general, no se descartan otras movilizaciones", manifestó el secretario general adjunto de Camioneros y secretario gremial de la CGT, Pablo Moyano, al ser consultado sobre las opciones que se analizarán en la reunión del Comité Confederado prevista para el próximo 25 de septiembre, según consignó la agencia DyN.
Además el gremialista anunció que la conducción sindical "va a discutir dentro de la CGT cómo se sigue confrontando a este Gobierno que no escucha y que no recibe a los trabajadores".
En respuesta a esas declaraciones, el ministro de Producción Francisco Cabrera, consideró que la medida de fuerza sería algo "inoportuno" en un momento que "crece el empleo, la productividad y la inversión". En ese sentido advirtió a los gremios que realizarlo sería "ridículo".
"Más allá de que el sector sindical no lo manifiesta abiertamente, los números de los últimos cuatro trimestres muestran una economía creciente. No hay duda de que hay un motor de crecimiento homogéneo y estable, es un marco positivo por lo cual estamos contentos", destacó el funcionario durante una entrevista radial. "No estoy de acuerdo cuando se sientan a hablar con nosotros sobre la productividad y después hacen un acto y dicen cualquier cosa. Eso no es hablar con la verdad", completó.
En ese contexto, el titular de la cartera de Producción volvió a descartar que haya una reforma laboral prevista, aunque resaltó: "Debe haber una discusión con el sector el trabajo respecto de todos los desafíos de una economía más moderna que crece y debe estar integrada al mundo".
Sin embargo para Moyano, con esta visión, "el Gobierno está allanando todo el camino" para avanzar con una reforma similar a la aplicada en Brasil. "Si llegan a obtener un triunfo seguramente van a salir con toda la propaganda y con toda la fuerza para imponer una reforma laboral que no va a perjudicar a los dirigentes o los sindicatos pero van a atacar a los trabajadores", señaló.
"Nosotros no somos Brasil. En la primera que quieran meter la reforma se viene una pelea importante", expresó el dirigente camionero cuando le preguntaron acerca de una posible intención del Ejecutivo de aplicar una modificación al régimen laboral como lo hizo el principal socio de la Argentina en el Mercosur.