En su columna de esta semana en PERFIL sobre el fenómeno Milei, Gustavo González dedica una parte del texto a un ranking de los insultos que este hombre le suele propinar a políticos de todos los sectores.
González explica por qué la relevancia de su publicación: “Lo que dice y cómo lo dice no solo habla de él, habla especialmente de un odio que atraviesa a distintas clases sociales y la forma en que ese odio se expresa. Y es relevante porque Milei, como el malestar que representa, tiene condiciones para crecer políticamente”.
Lo que sigue son algunos de los agravios de Milei y sus destinatarios:
- A Martín Kulfas le dijo “pedazo de mierda, por qué no estudiás, h.d.p.”.
- A Horacio Rodríguez Larreta, “zurdo de mierda, te aplasto, sorete, gusano arrastrado, pelado asqueroso de mierda”.
- A Axel Kicillof, “enano diabólico”.
- A Mauricio Macri, “pelotudo”; y a su gabinete económico, “torre de estiércol, pedazo de mierda”.
- A Martín Guzmán, “inútil, no decís un porongo, mentiroso h.d.p. y la c. de tu madre”.
- A Joseph Stiglitz, “pelotudo”.
- A la diputada Gladys González, “por qué no te vas a la c. de tu madre”.
- A la diputada Gabriela Estévez, “h.d.p., la c. de tu madre, pedazo de mierda”.
- A Wado de Pedro, “sorete”.
- A Gerardo Morales, “parásito de mierda, la c. de tu madre, chorro h.d.p.”.
- A Fernando Iglesias, “tontito, bobito, pedazo de pelotudo, te hacés el boludo, la c. de tu madre, estúpido, idiota”.
- A Leandro Santoro, “chorro y burro”.
- Al legislador Daniel Lipovetsky, “parásito chupasangre”.
Lejos de disculparse o atenuar su virulencia, Javier Milei explica de este modo su actitud: “Los idiotas que me critican mis formas, me chupan un huevo. Si un tipo dice un montón de pelotudeces, es un pelotudo”.