El Gobierno lanzó la presidencia Argentina del G20 en un evento con fuerte presencia política y empresaria en el Centro Cultural Kirchner (CCK). El presidente Mauricio Macri fue la figura central del evento al que concurrieron, además de todos los ministros que estarán involucrados en los 50 eventos que compondrán la agenda anual del grupo, gobernadores peronistas, como Gildo Insfrán y Domingo Peppo. No se vio presencia sindical, en medio de las diferencias por la reforma laboral, a pesar de que uno de los temas centrales presentados por el Gobierno es el futuro del mundo del trabajo y el cambio tecnológico. Según confirmaron a PERFIL fuentes de la CGT, la ausencia tuvo una razón: no los invitaron.
Macri recibió, por medio de mensajes grabados, el apoyo de los jefes de gobierno de Alemania, Angela Merkel; y de Japón, Shinzo Abe. El nipón marcó además sus fuertes diferencias con el “proteccionismo”. Fue un aviso del rol más importante que tendrá el Presidente como anfitrión del evento anual: deberá mediar entre el disruptivo discurso proteccionista de Trump y la apertura que pregonan la mayoría de los integrantes del foro. Macri anticipó que será un "mediador de buena fe".
A tono con un elemento clásico del discurso PRO, durante el evento se destacó que el G20 es un trabajo mundial, en equipo. También será un trabajo en equipo para el Gabinete, ya que muchos ministros tendrán una participación en este evento. Los más importantes serán el Canciller, Jorge Faurie; el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne; y el Jefe de Gabinete, Marcos Peña. Este último concentra el rol primordial en la organización de los 50 eventos que se realizarán a lo largo del año, con la reunión de Jefes de Estado en noviembre como plato principal.
Asistieron también al evento la ministra Patricia Bullrich, que llegó flanqueada por sus dos secretarios, Gerardo Millman y Eugenio Burzaco. La titular de Seguridad sólo aceptó responder preguntas sobre un tema que poco tiene que ver con el evento global: la detención del vicepresidente de Independiente. Poco después de ella llegó el titular de la AFI, Gustavo Arribas, con quien la ministro ya coordina los planes de seguridad para el evento.
Otro ministro que se animó a hablar fue Germán Garavano, quien destacó la importancia del evento y recordó que su cartera tendrá una participación importante en los temas referidos a la lucha contra la corrupción y el lavado que se discutirán en este foro. También habló el empresario Daniel Funes de Rioja, quien tendrá un rol importante en el encuentro paralelo del mundo privado, conocido como B20. “La presidencia es el reconocimiento de que argentina está y juega las reglas del juego del mundo, que está y se hace respetar; eso también permite y genera conciencia sobre credibilidad y reglas de juega algo fundamental para la inversión”, evaluó el titular de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal).
Faurie, Dujovne y Peña ofrecieron una conferencia de prensa tras el discurso de Macri donde marcaron la importancia del evento. El canciller confirmó que el encuentro de Jefes de Estado será en Buenos Aires, pero evitó confirmar el lugar a pesar de que dijo que “está decidido”. Según adujo, “por razones de seguridad”. PERFIL pudo saber de diferentes fuentes gubernamentales que la reunión se hará en el CCK, el lugar elegido para el lanzamiento y también dónde se ubican las oficinas de la unidad ejecutora que creó la Jefatura de Gabinete.