Leonardo Fariña, imputado colaborador en el marco de la causa de la "Ruta del Dinero K", declaró este miércoles durante casi cinco horas ante la justicia y afirmó que, para él, la empresa "Austral Construcciones", nave insignia del grupo Báez, eran "básicamente Lázaro y él", en referencia al fallecido ex presidente Néstor Kirchner.
El financista reveló que el lavado de dinero comenzó diez días después de la muerte de Kirchner por decisión de Báez, quien está detenido por orden del juez federal Sebastián Casanello desde abril de 2016. En la causa hay otros 23 acusados, entre ellos los hijos de Báez, Martín, Leandro, Luciana y Melina, y el ex dueño de la financiera SGI, Federico Elaskar, contra quien también apuntó Fariña.
Fariña dio datos, nombres, fechas, montos, cuentas y distintos movimientos con precisión. Sostuvo que "el proceso de canalización de fondos” del que participó empezó diez días después de la muerte de Kirchner. Explicó que las condolencias por el caso se las hizo llegar a Lázaro a través de Martín Báez y que si bien pensó que todo iba a terminar, se sorprendió. "Le mando mail a Martín (con condolencias para que se las pase al padre y a los días me cita a una reunión y me dice de empezar con el proceso de expatriación de fondos, eso fue diez días después de la muerte del señor Kirchner".
Fariña reveló que el lavado de dinero comenzó diez días después de la muerte de Kirchner por decisión de Báez, quien está detenido por orden del juez federal Sebastián Casanello desde abril de 2016.
Relató que luego de eso se reunió con Lázaro en el domicilio de la calle Carabelas en Capital y que siguieron las operaciones. “El dinero llegaba a Buenos Aires el mismo día que hacíamos la transferencia. Hubo veces que el dinero que venía antes y esos días quedaba en el departamento de Lázaro en Belgrano. Tenían custodia que ellos decían que eran de la Polícia de allá. Paraban en la casa de Santa Cruz”, aseguró.
Agregó que sólo de enero de 2011 le constaba: "la salida de entre 25 y 30 millones de dólares". Fariña también habló sobre Austral, de que dijo que tenía como principal ingreso a la obra pública y relató cómo habían buscado quedarse con Telecom. "Báez llamó por teléfono al señor Kirchner, el cual le manifiesta que habíamos llegado tarde y el negocio estaba cerrado", detalló al tiempo que dio referencias del proceso licitatorio.
Fariña está disposición del Programa de Protección de Testigos e Imputados del Minsiterio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación desde abril de 2016. Su declaración continuará el próximo miércoles.
Sobre los manejos de Austral aseguró que "gran parte de los ingresos de la empresa se extraían del giro comercial y las obras se seguían adjudicando, había que justificar la salida del dinero blanco al circuito negro, y por eso se generaban costos que eran mentirosos. Contó, además, que conoció a Báez por intermedio de otro cliente, con quien viajó a Río Gallegos, cuando tenía 23 o 24 años, para comenzar a trabajar en el aspecto financiero de Austral Construcciones. "Hasta ese momento no tenía ningún tipo de referencias de qué era Austral Construcciones, para mí no representaba ningún tipo de empresa conocida",.
En otro de los tramos de su declaración, Fariña habló de "SGI", la financiera de Federico Elaskar y se refirió a él, con quien está enemistado. “SGI no era una financiera grande, pero tenía algo importante que era la linea de redescuento”, explicó y detalló la utilidad de este último punto para las maniobras que debían realizar. Contó que la operación se hizo en el departamento de Elaskar y agregó: “yo estaba todos los días en SGI” al tiempo que completó: “me llama la atención que digan que yo no tenía un lugar ahí”.
También hizo alusión a los procesos que tuvo en su contra y a cómo terminó detenido. Fariña está disposición del Programa de Protección de Testigos e Imputados del Minsiterio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación desde abril de 2016. Su declaración continuará el próximo miércoles.