Con 25 votos a favor entre los que se encuentra el de Argentina, la Organización de los Estados Americanos (OEA) condenó las últimas elecciones en Nicaragua al asegurar que “no fueron libres, justas ni transparentes y no tienen legitimidad democrática”. Esto marca un giro del gobierno de Alberto Fernández que instó a que se realice una “evaluación colectiva inmediata”.
En el último día de la 51ª Asamblea General e impulsada por Estados Unidos y otros ocho países, la OEA firmó una resolución en la que se condenan los comicios en Nicaragua en las que Daniel Ortega se proclamó ganador. Ésta vez, Argentina fue uno de los 25 miembros que firmó a favor mientras que hubo siete abstenciones, y el voto negativo de Nicaragua.
El vicecanciller, Pablo Tettamanti, pidió que se realice una “evaluación colectiva inmediata” en el Consejo Permanente en la OEA para seguir el tema. Sobre esta postura que marca un giro sobre la no injerencia en asuntos internos de otros países, desde Cancillería se explicó que “no se hizo antes porque no se habían llevado a cabo las elecciones y porque el prejuicio solo alimentaba más incertidumbre. A raíz de eso, nuestro país comenzó a cuestionar el desenlace de las elecciones del país centroamericano. Nicaragua había asumido un compromiso, pero no pudo demostrar que las elecciones fueran justas y libres”.