El malestar por el cierre de listas en el oficialismo sigue sobrevolando, muy especialmente, en las filas sindicales. Con el faltazo de los principales referentes de la CGT (Omar Viviani, de los taxistas y Antonio Caló, de la UOM, entre otros) el líder del gremio, Hugo Moyano, encabezó ayer un "plenario de reflexión" en Esteban Echeverria.
Sin embargo, el gobierno hoy hizo oídos sordos al reclamo del líder Camionero. Y para el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, las expresiones de Moyano no significan un distanciamiento entre la organización y el Gobierno y las consideró "comprensibles".
"No solamente estamos para votar o concentrarnos, o cuando nos llaman para una movilización. Los trabajadores tenemos la herramienta y el instrumento más importante de la democracia: tenemos la posibilidad de encauzar el voto y seremos invencibles", aseguró ayer Moyano.
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, negó hoy que haya un distanciamiento entre el Gobierno y la CGT, al juzgar "comprensible" la queja del jefe de la central obrera por la pérdida de lugares en las listas, y consideró que sus expresiones "no tienen que ser leídas en clave confrontativa".
"Él piensa así, él cree que directamente un dirigente sindical puede pasar de ser conducción de un sindicato a conducir los destinos del país. Ese es un tema razonable, discutible, opinable, interesante, porque en nuestro país el movimiento obrero siempre ha tenido una presencia política y ha tenido diputados, senadores, vicegobernadores y gobernadores", sostuvo.
Consultado por radio La Red si el reproche público que hizo Moyano ayer implica un "distanciamiento" entre la CGT y el Gobierno, Tomada respondió: "No, este tipo de declaraciones, este concepto, este pensamiento del secretario general de la CGT, es reiterado, lo ha dicho en otras oportunidades, es una expresión que no tiene que ser leída en clave confrontativa".
El encuentro sindical, que se realizó en el Centro de Conveciones del Sindicato de Obreros y Empleados del Plástico, que dirige Vicente Mastroccola, sirvió de catarsis para el sindicalista: "Sólo desde el poder se modifican las cosas, no desde la presión con la que se pueden corregir algunas cosas, pero no se las modifica. Tenemos hombres con la suficiente capacidad para sentarse en la Casa Rosada", lanzó.
La Presidenta envió este martes un claro mensaje a los que quedaron afuera del armado de listas: "Yo he pasado de ser títere del doble comando a una deprimida crónica, y ahora soy una autoritaria rebanadora de cabezas de utópicos candidatos, todo en el curso de unos meses".
En declaraciones al diario La Nación, el ministro de Economía y flamante compañero de fórmula de Cristina, Amado Boudou, destacó a Moyano "como un gran dirigente obrero y político". Hacía el interior de la CGT, el cambionero ha sumado recriminaciones habida de que el único que consiguió un lugar en las listas nacionales fue hijo Facundo.
