La trágica muerte del fiscal Alberto Nisman, en circunstancia aún no aclaradas por la justicia argentina, generó una amplia repercusión en gobiernos y medios de comunicación extranjeros. Donde quizás tuvo más resonancia fue en Israel y los Estados Unidos. En Irán, en cambio, aún no hubo una reacción oficial por el fallecimiento del funcionario.
El gobierno de Benjamin Netanyahu recordó a Nisman como un “hombre de derecho valiente y destacado”, al tiempo que solicitó que la justicia argentina continúe con su investigación. Mediante un comunicado de la Embajada israelí en Buenos Aires, el Ejecutivo manifestó: "El Estado de Israel expresa la esperanza que las autoridades argentinas continúen con la investigación del Fiscal Nisman y realicen todos los esfuerzos necesarios para llevar a la justicia a los responsables de los ataques terroristas”.
La prensa de ese país también se hizo eco de la noticia. “Encontraron muerto al fiscal argentino que acusó a la presidenta de encubrir a Irán por el atentado a la AMIA”, tituló The Jerusalem Post en su versión digital. En tanto, el diario Haaretz enfatizó que Nisman estaba a punto de presentarse ante el Congreso para ahondar su denuncia: “Fiscal de ataque a centro judío en Argentina hallado muerto antes de comparecer sobre el acuerdo con Irán”.
En Teherán, la noticia no ocupó las primeras planas. La prensa de ese país se focalizó en las negociaciones nucleares con las potencias de Occidente y en las muertes en Siria de dos altos jefes militares de la Guardia Revolucionaria y de Hezbollah. Según los principales diarios de Teherán, el militar iraní Mohammad Allahdadi, y Jihad Mughniyeh, hijo de uno de los líderes de la milicia libanesa, habrían sido alcanzados por un bombardeo israelí.
La prensa de los Estados Unidos, por su parte, le dio la misma importancia al asesinato del general iraní y a la muerte de Nisman. El sitio digital The Daily Beast publicó una osada columna de opinión, firmada por Christopher Dickey, editor de Internacionales, que señala como responsable al gobierno de Hasan Rouhani. “¿Irán mató al fiscal argentino Alberto Nisman”?, se pregunta la publicación norteamericana, que recuerda que la investigación del fallecido apuntaba hacia altos funcionarios de Teherán.
Al igual que tras los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA, Argentina volvió al centro de la escena internacional con la muerte de Nisman. Nuevamente, un manto de sospechas y versiones contradictorias pusieron al país bajo la mirada de los medios de comunicación de todo el mundo.
(*) Redactor de Internacionales de Diario Perfil.
